Crisol Internacional: “Entre fronteras, valles y viñedos, Alsacia-Lorena”
Mirando con detenimiento y calma el mapamundi y revisando las fronteras geopolíticas actuales podemos percatarnos que a lo largo de la historia de la humanidad han habido muchos cambios. Particularmente en el continente europeo donde han ocurrido muchos movimientos independistas durante el siglo XX. Hace apenas 100 años Europa se constituía solamente por 25 países y hoy cuenta ya con 47 naciones independientes y soberanas, incluyendo Turquía en su porción Occidental, siendo además el último “en nacer”, el Estado de Montenegro y según los analistas políticos podrían surgir más naciones independientes en el futuro. Asimismo, cabe destacar que 27 países europeos están integrados política y económicamente a través de la Unión Europea, organismo multilateral que surgió en 1993 sobre los cimientos y principios de la Comunidad Europea siendo creado en los años cincuenta.
Históricamente cabe agregar que hace apenas 3 años, es decir en 2018, un grupo de países del Báltico, es decir Estonia, Letonia y Lituania, al igual que otros como Islandia, Bielorrusia y Azerbaiyán, conmemoraron sus primeros cien años de independencia, y recordando el pasado hay que recalcar también que especialmente 1918 fue un año complicado y turbulento en el “Viejo Mundo”, ya que una vez terminada la Primera Guerra Mundial, el mapa de Europa cambió por completo y definitivamente teniendo desde entonces otra óptica la geografía mundial que la que nuestros antepasados estudiaron. Así, el llamado Imperio austrohúngaro se había desintegrado para los finales de la Primera Guerra Mundial y en Rusia un año antes ya había estallado la Revolución Bolchevique. A la vez también hubo otros cambios geopolíticos significativos en cuanto a países como la antigua Yugoslavia y Checoslovaquia que no vivieron el inicio del nuevo milenio como tales, sino como nuevas naciones independientes hoy conocidas como: Serbia, Croacia, Eslovenia, Macedonia, Kosovo, Bosnia-Herzegovina, Montenegro y en el caso del territorio checo, éste se convirtió en la República Checa y en la República de Eslovaquia.
Ahora bien, las guerras, conflictos políticos e intereses territoriales y económicos han acompañado a la humanidad lamentablemente desde un principio y aún los seguimos observando y registrando en algunas partes de África y Asia, dónde se trazan nuevas fronteras tras los conflictos y rebeliones generadas. Sin embargo, también es cierto que han habido acuerdos políticos y soluciones pacíficas a disputas territoriales como fue el caso del conocido y muy bello Territorio Imperial de Alsacia-Lorena, ubicado en el corazón de Europa entre Francia y Alemania, que fue uno de los llamados Reichsland, entidades del histórico Imperio alemán. Justo en Noviembre del año de 1918, en vísperas del armisticio, una parte de la sociedad, con el apoyo de algunas unidades militares, se unió al movimiento insurreccional de la Revolución de Noviembre y declaró el 11 de noviembre de 1918 la República Independiente de Alsacia y Lorena. Posteriormente, entre el caos político y social de las Guerras Mundiales y por decreto sobre la totalidad del territorio de soberanía francesa, tomaría el nombre de Alsacia-Mosela.
Con un auténtico legado franco-alemán, la región de Alsacia- Mosela, es de las zonas boscosas más bellas de toda Europa, distinguida además por ser siempre hospitalaria con sus visitantes, ofreciendo no solamente el “bouquet y sabor” de sus exquisitos vinos, sino también brindando una gastronomía muy variada y exquisita lo que le ha ganado reiterada fama mundial. Geográficamente la región de Alsacia-Mosela se encuentra en el valle del Río Rin y al Este de la Cordillera de las Montañas Vosgos, mientras que la parte de Lorena o antigua Lothringa se ubica en la parte alta del Valle del Río Mosela, famosa y privilegiada zona vinícola. Este territorio estaba compuesto por el 93 % de Alsacia (del cual 7 % permaneció francés) y el 26 % de Lorena (del cual 74 % permaneció francés). Por razones históricas, las disposiciones legales específicas siguen siendo aplicadas en este territorio que abarca una extensión de 14, 496 km² y que propia y legalmente es hoy conocida como Alsacia-Mosela, cuya belleza natural de la región ha atraído visitantes de muchas partes del mundo y no es casualidad que su capital, la Ciudad de Estrasburgo, fuera elegida como sede alterna del Parlamento Europeo para llevar a cabo la sesiones plenarias ordinarias, mientras que en la Ciudad de Bruselas, Bélgica se celebran las reuniones de las comisiones y de los grupos políticos, buscando soluciones pacíficas y de “buenos vecinos” entre los países miembros y también con el resto del mundo.
Ahora bien, Alsacia Lorena, también le dio vida a un extraordinario recorrido mediante un ciclo-vía que abarca el Viñedo de Alsacia que nació con motivo del 60 aniversario de la célebre Ruta de los Vinos de Alsacia. Se trata de un itinerario apacible, bucólico y placentero por pueblos típicos de la zona y por supuesto de sus más de treinta joyas vitivinícolas cubriendo un circuito de aproximadamente 170 kms. Una de las excursiones más populares inicia en la imponente Catedral de Estrasburgo, que fue construida entre los siglos V al X, prosiguiendo de ahí con dirección al viñedo de la Couronne dór, donde se pueden descubrir los vinos “de los negociantes de la llamada Capital de Europa”, ya que normalmente son servidos en la mesa de los reyes. Alternativamente también se puede explorar pedaleando hasta el poblado de Scherwiller, ubicado en una encrucijada entre los valles y el Piamonte Alsacio, famoso por su vino “Riesling” y se puede recorrer así 370 hectáreas de extraordinarias viñas. Alsacia Lorena también es la tierra de los castillos o châteaux, como el Castillo de L´Ortenbourgh, construido por las dinastías de Habsburgo en el siglo XII, o también darle una vuelta al Castillo Ramstein, una antigua retaguarda, de fácil acceso e igualmente muy atractivo. En fin, Alsacia- Lorena siempre brinda un re-encuentro con la historia, cultura y exquisita gastronomía y desde luego sublimes posibilidades de decir “Santé”, “Entre fronteras, valles y viñedos”… y recordar lo dicho por el escritor británico Robert Luis Stevenson: “El vino es poesía embotellada”…
P.S.:https://verne.elpais.com/verne/2018/03/26/articulo/1522076346_130760.html https://europa.eu/european-union/index_es, https://www.europarl.europa.eu/news/es/faq/20/por-que-se-designo-estrasburgo-como-la-sede-oficial-del-parlamento-europeo https://es.france.fr/es/alsacia-lore