Crisol Internacional:“Cuando Occidente encuentra a Oriente …Azerbaiyán”
La historia mundial da muchas pruebas que los encuentros entre Occidente y Oriente no siempre han sido pacíficos y mucho menos amistosos o románticos. Prueba de ello son las grandes guerras y batallas que se han generado desde tiempos muy remotos y que muchas veces se han combatido en las líneas fronterizas que dividen el Oeste del Este: desde las Guerras Médicas, las múltiples batallas Romanas, las de los Hunos de Atila, las históricas Cruzadas, las invasiones del poderoso Gengis Khan, las épicas Napoleónicas , las Guerras Mundiales, el paso por la Guerra Fría, los conflictos contemporáneos de Medio Oriente, la Guerras del Golfo Pérsico, las invasiones hacia Afganistán e Irak, Siria, y muy recientemente el conflicto de Ucrania…Una lista que parece interminable y a la vez cruel cuando reflexionamos sobre sus consecuencias, como lo es el constante flagelo que han vivido los pueblos directamente involucrados y particularmente, la ruptura del balance político, social y humano.
Ahora bien, el incansable viajero moderno, ya sea real o virtual, motivado por muchas razones para iniciar su camino, quizás haya recorrido destinos muy conocidos como las rutas coloniales, arqueológicas y ecológicas de nuestro increíble México o tal vez, más allá de nuestras fronteras haya visitado destinos muy populares como: Disneylandia, Las Vegas, Orlando, Nueva York, Paris, Madrid, Londres y Roma. Cada viajero guarda sus recuerdos e impresiones como un tesoro valioso, lo que a algunos les encanta mostrar o más bien compartir y narrar y otros prefieren seguir disfrutando de sus experiencias silenciosamente. Como sea, no siempre son los destinos más anunciados y glamurosos por los medios, redes sociales o amigos, sino más bien aquellos sitios recónditos que prometen no solamente la aventura singular, sino también una profunda introspección cultural y humana del ser. Viajar es una experiencia tan sublime y afín como lo es el poder contemplar un bello y brioso amanecer sobre nuestra bella Bahía de La Paz.
Precisamente, el poco explorado y conocido país de Azerbaiyán que hace tres décadas aún se encontraba bajo el Socialismo y por ello, justo detrás de la famosa Cortina de Hierro, es una tierra muy antigua y legendaria porque ya contaba con pobladores durante la época del neolítico, es decir 6000- 3000 A.C. Esta región fue dominada por los Persas, Cristianos y tras su independencia de Rusia en 1991, se convirtió en una nación predominantemente islámica, específicamente del grupo Shia. Azerbaiyán representa la región más extensa en el Cáucaso y es un o puente geográfico e histórico entre Europa Oriental y Asía Occidental (una región natural que se localiza justo entre el Mar Negro y el Mar Caspio, protegido por la cordillera del Cáucaso, con una longitud aproximada de 1200 km), que lo limita con el Mar Caspio, así como sus colindantes, Rusia al Norte, Georgia al Noroeste, Armenia al Oeste, Irán al Sur y Turquía al Noroeste. Curiosamente y según la mitología griega, justo está zona era uno de los pilares de las grandes civilizaciones que sostienen al mundo y dónde se hablan aproximadamente 60 diferentes lenguas. Se narra que Prometeo, amigo de los mortales fue encadenado en esas montañas por Zeus después de haber robado el fuego a los Dioses, suceso que inspira y motiva no solamente el origen del nombre del país “ Protector del Fuego” y posteriormente “ Tierra del Fuego”; sino también la asociación con hechos bélicos y conflictivos ocurridos más recientemente. Sorprendentemente, aún bajo un orden islámico, Azerbaiyán es un país con mucha tolerancia religiosa, secularismo, bilingüismo -azerí y ruso- y un gran número de expresiones artísticas desde las más antiguas, que como en Baja California Sur, se encuentran plasmadas en pinturas rupestres. Además, posee una espléndida y milenaria arquitectura, que se ve reflejada a través de sus majestuosos monasterios, templos y murallas, así como el multifacético teatro y la ópera, en donde se hallan literalmente dos mundos opuestos: Occidente y Oriente. Los mágicos sitios de Gobustán- con sus extraordinarios “vólcanes de lodo” y Atashga son solamente algunos de los más espléndidos refugios para el viajero cultural de Azerbaiyán. Esta fusión cultural y de integración a un mundo más moderno y a una transición política ha traído resultados favorables para el desarrollo económico e industrial de esta joven nación de aproximadamente 9.6 millones de habitantes con un espíritu abierto que eligió su camino hacia una economía de mercado tras el derrumbe de la Unión Soviética, aprovechando sus recursos naturales como el petróleo, gas y las fuentes de energía hidráulica, eólica y solar, bajo los criterios de sustentabilidad, construyendo parques industriales con lineamientos ecológicos, así como también impulsando la industria electrónica, metalúrgica, química y de alimentos, pero conservando a la vez costumbres y tradiciones ancestrales como el ritual del té y los oficios como del hilado de alfombras y bordado de telas, tan mágicas como en un sueño de las “Mil y una noches”.
El nuevo gobierno de Azerbaiyán, tras su independencia de la URSS, implementó muchas medidas para impulsar el desarrollo humano, incluyendo campañas de alfabetización, mejoras a la educación superior con colegios y universidades especializadas, desarrollando estrategias de mayor competitividad profesional para combatir el desempleo y mejorar las condiciones sociales de su población. Indudablemente, las inversiones tanto nacionales como extranjeras realizadas durante los últimos veinte años han traído un mayor bienestar y progreso para esta nación. Asimismo, Azerbaiyán ha logrado insertarse de una forma más activa en la política, economía, cultura y los deportes internacionales, recibiendo líderes mundiales en su capital Bakú. Además, forma parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas como miembro no permanente, creando así un equilibrio entre las fuerzas, opiniones e intereses internacionales representados en este organismo tan relevante para restaurar y mantener la paz mundial, esto aún en momentos de tensiones militares y políticos ocurridos durante las tres últimas décadas a lo largo de las franjas fronterizas de los nuevos estados Independientes en Europa Oriental y los países del Medio Oriente, Azerbaiyán ha mantenido la calma y serenidad diplomática para mantener “un encuentro armonioso entre Occidente y Oriente” …
P.S. Notas culturales, estadísticas y vídeo informativo:
http://www.azerbaijans.com/content_463_de.html
https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/geos/aj.html