Crisol Internacional: “En vino veritas est…Vendimia a la española”
Quién de nosotros no ha leído o escuchado la expresión “En vino veritas est” preguntándose sobre su origen y significado. Al investigar un poco sobre este tema hallamos varios escritos en los cuales algunos antiguos historiadores hacen mención de esta expresión señalando que en “distintas poblaciones recurrían al consumo de vino durante reuniones de los consejos..“ Así, por ejemplo el historiador griego Heródoto, describe en sus escritos como los persas no tomaban decisiones importantes si no se encontraban en estado de ebriedad tras haber bebido vino durante un buen rato; consideraban que “ese era el momento en el que las opiniones eran realmente sinceras…”
También el escritor e historiador romano Tácito, dejó constancia sobre cómo los pueblos
germánicos tenían como costumbre beber durante los consejos ya que consideraban que “en
estado de embriaguez nadie podía mentir…” Siendo estos ejemplos que nos dan buenas sorpresas sobre la conducta humana y específicamente sobre el consumo histórico de las bebidas etílicas derivadas de las uvas que en aquel contexto se consideraba muy propicio…
La tradición de los festivales dedicados a la cosecha de la vid conocidas como las “vendimias” se remontan a siglos atrás y uno de los países en donde fueron y son más populares es España donde se celebra desde hace muchos siglos. Se cree que los fenicios y los griegos introdujeron las primeras vides en la Península Ibérica hace más de 2.000 años. No obstante, fueron los romanos quienes realmente desarrollaron y expandieron la vinicultura en la región, estableciendo numerosas villas y fincas vitivinícolas por todo el territorio bajo su dominio. Es más, y según las fuentes documentales, a lo largo de la Edad Media, la producción de vino se convirtió en una actividad muy relevante en monasterios y abadías en donde los monjes desempeñaron un papel fundamental en la mejora de las técnicas de cultivo y la elaboración de vinos de alta calidad. Se sabe también que durante el Renacimiento, la vinicultura se extendió aún más y las exportaciones de vino español comenzaron a crecer y poco a poco a tomar fama mundial.
Recorriendo actualmente la Península Ibérica el viajero puede quedar hechizado por la magia y el encanto de sus pueblos y más aún si se las visita a finales del verano cuando en diversas regiones españolas se rinde tributo a la vid. A lo largo de su territorio se extienden casi un millón de hectáreas destinadas a la producción vitivinícola, es decir, al cultivo de la vid y a la posterior elaboración de vinos derivados. Así en la región de Jerez, según las fuentes oficiales “la vendimia ha comenzado fundamentalmente en lugares de grandes bodegas, que están procesando uva de viñedos situados en el interior, que es siempre la primera en alcanzar los niveles suficientes de madurez.” También se informa que: “Las suaves temperaturas desde el momento del envero han propiciado una maduración muy lenta de la uva, lo que en algunas de las muestras tomadas en los viñedos del interior se traduce en unos niveles de acidez inusualmente altos.” Lo que según los expertos del Consejo Regulador Español representa un potencial importante en términos de calidad. Cabe mencionar que en esta zona vitivinícola como también prácticamente en todas alrededor del mundo: “La cosecha de este año está condicionada por la climatología imperante durante el año agrícola, que ha sido “muy seco” al recogerse apenas 400 litros de agua por metro cuadrado, frente a la media anual superior a 600.”
Mientras que en la región mundialmente famosa de La Rioja, también conocida como la “Región de los Siete Valles” situada al Norte de España la vendimia ya está por comenzar justo ahora en las parcelas con uva blanca más tempranas. Los expertos aseguran también “el “excelente” estado sanitario que presenta este año la uva, con una producción más moderada que la del pasado año, con menos racimos por cepa y siendo más pequeñas y una uva muy suelta, lo que constituye la imagen ideal de calidad para cada una.” También se afirma que habrá vendimias importantes en las zonas de Extremadura y Cataluña.
Por supuesto y hablando de “En vino veritas est” puede surgir la pregunta esencial de en qué
consiste realmente la vendimia y la respuesta está en el tiempo de madurez para cosechar y
recolectar las uvas de las viñas lo que puede ser manual o mecanizado. Para asegurar la calidad es muy crucial el buen desempeño del vendimiador, quien es responsable de supervisar el despalillado de la uva, es decir separar las uvas de sus tallos y partes vegetales y el estrujado, también conocido como el pisado de modo tradicional o bien con ayuda de máquinas. La vendimia en España tiene lugar entre los meses de agosto y octubre y debido a las altas temperaturas se inicia la recolecta y cosecha a primera hora del día e incluso antes del amanecer colocando cuidadosamente los racimos en cestos que le brindan protección; la elección de una u otra fecha dependerá del estado de maduración que se desee para las uvas y por lo mismo, el tipo de vino que se cosechara.
La vendimia tradicional sigue siendo la fiesta del pueblo, caracterizada por la recogida manual de las uvas, racimo por racimo y sobre todo el divertido estrujado o pisado del fruto ya sea descalzo o con botas de hule, subiéndose al lagar, el recipiente típico y pisando o incluso bailando con ritmo y respeto desde el centro hacia la orilla lo que a pesar del paso del tiempo es una tradición que no se ha perdido, siendo una labor física ardua que se convierte re en la diversión del baile y de la convivencia…y entonces sí, podemos llegar a la conclusión de que bailando y cantando con alegría que “En vino veritas est…” o como decía el pintor Salvador Dalí: “El que sabe degustar no bebe demasiado vino, pero disfruta sus suaves secretos…”
P.S.: https://covinas.com/in-vino-veritas
https://raiadiplomatica.info/2023/09/22/la-vendimia-en-espana-historia-importancia-comercial-y-
de-exportaciones/
https://valenciafruits.com/agosto-mes-de-vendimia-en-espana/
https://www.debuenavid.es/blog/aprender-de-vino/la-vendimia