Crisol Internacional:” Solsticio de verano, recibiendo la magia del sol”

Aún con el eminente cambio climático en la mayoría de las regiones geográficas del mundo es muy notable el cambio de las estaciones y en el hemisferio Norte la mayoría ya espera con ansias la llegada del verano, con más horas de luz, de sol y calor después de un invierno obscuro, largo y frio. Al respeto cada uno de nosotros tiene su propia percepción sobre las condiciones climáticas y sus efectos sobre la mente y el cuerpo y cómo este cambio ambiental nos puede motivar e inspirar o por lo contrario como nos puede deprimir y “apachurrar” un día gris …

Desde tiempos muy remotos y para diferentes culturas y tradiciones la llegada del solsticio de verano ha sido un acontecimiento especial e incluso ha sido recibido y celebrado a través de ciertos rituales y ceremonias para darle la bienvenida. La palabra solsticio viene del latín “sol” y “sistere”, quedarse quieto debido a que parece que el sol se detiene y aparentemente se “queda quieto” durante el solsticio, alcanzando su máxima declinación norte o sur en relación con el ecuador. En sí el “solsticio invernal” significa según la RAE: “que ese día es el más largo del año y la noche la más corta.” Durante la antigüedad, las civilizaciones antiguas contemplaban los cuerpos celestes, que eran relacionados con “entidades poderosas”, dioses o semidioses deidades que, al ser honrados concedían buenas cosechas, un clima amable y por lo tanto una vida más plena. Es justo por este fenómeno natural en el que el sol es el protagonista y que nuevamente está por ocurrir entre el 20 y el 21 de Junio de este año, ya que es el momento cuando la Tierra se inclinará un poco más hacia el sol. Es el tiempo que desde las civilizaciones más antiguas hasta los tiempos modernos hay tanto preocupación como interés por este ciclo de la tierra, cerrándose el ciclo como también el final e inicio de nuevas siembras, la purificación, la vendimia y el nacimiento y florecimiento de la vegetación.

Curiosamente de los rituales ancestrales que mayormente se han preservado y celebrado como huellas imborrables del paso del tiempo son los llamados “círculos de fuego”, los “baños de purificación” y también la limpieza del entorno, todo para recargarse de buenas energías que el sol nos puede regalar. Con el ritual del fuego se trata realmente de “saltar la hoguera” para eso tradicionalmente se prendía a campo abierto una hoguera enorme, donde los aldeanos se reunían a su alrededor y mientras que ardía el fuego, todos bailaban y bebían para celebrar y para al final saltar sobre ella. Se creía que al saltar el fuego se quemaban las malas energías y curiosamente este ritual tan ancestral ya se ha practicado en algunas casas para eliminar las llamadas “malas vibras”…

Sin lugar a dudas, el solsticio de verano está asociado como un elemento simbólico para la cosecha, la abundancia y también la fertilidad; además, se relaciona al sol con el renacimiento y la esperanza. Según las fuentes documentales correspondientes “desde épocas remotas ha existido una creencia generalizada que señala que durante el inicio del solsticio de verano se abre un portal para el ingreso de seres mágicos, como espíritus y hadas, a nuestro mundo.” Así, seguramente, también habrá el momento de despertar fantasías, ilusiones y sueños con el nuevo comienzo de esta estación….

Cabe agregar que en las latitudes del Norte como en Irlanda y Reino Unido se han celebrado durante varios siglos estas fiestas reconocidas inicialmente como paganas para brindarle la bienvenida al verano. Durante estas celebraciones los protagonistas eran los enmascarados, criaturas de fábulas y de leyendas como los duendes, hadas, unicornios y demonios. Asimismo y de acuerdo con estudios geológicos” se ha determinado que los solsticios datan de hace más de 4.400 millones de años…”

En el hemisferio Sur, la cultura inca celebraba su correspondiente solsticio de invierno con una ceremonia llamada Inti Raymi, un festival que se celebra en Cusco, Perú, cada 24 de junio, durante el solsticio de invierno: Mientras que en México para la cultura maya, también existía una relación significativa con el solsticio de verano. Así en Chichén Itzá, ubicada en la península de Yucatán en México y siendo uno de los sitios arqueológicos mayas más impresionantes que cuenta con una impresionante pirámide conocida como El Castillo, que está alineada con precisión astronómica con los solsticios de verano e invierno. Durante el solsticio de verano, el sol ilumina un patrón de sombras en la escalera principal de la pirámide que parece ser una serpiente descendiendo. Este fenómeno se conoce como el «descenso de la serpiente emplumada» y se cree que representa el descenso del dios Kukulcán, una deidad maya.

Hoy día en esa región persisten muchos de los rituales como por ejemplo el encender en casa a la hora de la puesta del sol una vela de preferencia aromática y además previo al acontecimiento; se recomienda “hacer una limpieza profunda de las casas para que la energía del sol entre por todos los rincones y que el fuego queme toda la mala fortuna.”

Los rituales de homenaje al Astro Rey consisten en sentarse en la naturaleza, contemplando la puesta del sol, vistiendo de blanco con algún atuendo amarillo, preparando una ofrenda y respetando los cuatro puntos cardinales con los elementos correspondientes como son: las flores de manzanilla hacia el Este, una vela amarilla hacia el Sur, agua hacia el Oeste y un girasol o limón hacia el Norte, mientras que en el Centro se puede colocar un recipiente con miel, maíz, y pétalos amarillos…En todo momento se guarda el respeto a los guardianes terrenales y celestes, así como también a los elementos naturales como son : el agua, el aire y el fuego buscando Invocar a nuestros guías espirituales, seres de luz, que entre todos forman un gran círculo de apoyo y protección a nuestro alrededor…olvidándose e incluso quemando escrito en papel lo malo o negativo para regenerar la vida en ese preciso momento. Que es un momento de meditación y también de reflexión sobre la vida, personal o colectiva en armonía y de respeto con el entorno y con buen ánimos y energía positiva o bien como lo expresaba el gran novelista ruso León Tolstoi: “La felicidad consiste en vivir cada día como si fuese el primer día de tu luna de miel y el último día de tus vacaciones de verano".

P.S.: https://247prensadigital.com/tiempo-libre/solsticio-de-verano-el-sol-en-las-culturas-milenarias/ https://www.admagazine.com/articulos/solsticio-de-verano-rituales-para-recibirlo https://idpc.gov.co/eventos/solsticio-de-verano