Crisol Internacional: “Un Paraíso re-encontrado- Borneo”
En nuestro moderno mundo tan grande y tan pequeño a la vez, afortunadamente aún quedan lugares misteriosos y arcanos por explorar y admirar, uno de ellos se encuentra ubicado al extremo del Sudeste asiático y es la tercera isla más grande del mundo: Borneo. La isla se divide administrativamente entre el pequeño y muy próspero Estado de Brunei y los países de Malasia e Indonesia. Pero dejando de lado las posibles confusiones sobre sus divisiones políticas y administrativas, la macro-región de esta extraordinaria isla cuenta con una impresionante biodiversidad de más de 15 000 diferentes especies de plantas, 220 de mamíferos, 13 de primates, 100 de anfibios, casi 400 más de peces y más de 400 especies de aves residentes, todas conjuntadas en sus extensas y muy tupidas selvas tropicales. En Borneo se encuentran especies verdaderamente peculiares y únicas como los elefantes y rinocerontes pigmeos, el gato rojo y el gibón de Borneo, la pantera nebulosa y el carismático orangután, del cual se conservan aún más de 10 mil ejemplares en esta zona. Es más, de cierta manera Borneo representa el sueño de muchos investigadores, biólogos, ecologistas y amantes de la naturaleza, ya que ahí se descubren constantemente nuevas especies, tanto de plantas e insectos como de anfibios. El increíble hallazgo de que aproximadamente 1000 especies de insectos puedan convivir en un solo árbol sueña fantástico, difícil de creer y literalmente mágico, que es posible en este jardín del Edén del asiático, dándonos un importante mensaje sobre la naturaleza y el equilibrio de la vida sin la participación o interferencia del HOMBRE…
Estando esta riqueza natural situada no muy lejos del bullicio de la gran ciudad y de uno de los centros financieros más importantes del mundo como lo es Kuala Lumpur, capital de Malasia, identificada generalmente por sus majestuosas torres, “Petronas”, podemos encontrar la casi impenetrable selva tropical de Borneo, uno de los últimos pulmones de la TIERRA; justo ahí apartados de la modernidad viven aproximadamente 450 etnias, como por ejemplo: los Dayad y los Ibans, los últimos incluso albergan con gran hospitalidad a los viajeros para que éstos vivan la experiencia única de poder pasar una noche en la jungla, en un “longhouse”, una casa tradicional construida sobre pilotes. Desde un punto de vista antropológico, las etnias que habitan en Borneo se pueden considerar multiculturales, ya que a lo largo de sus costas predominan los malayos y los inmigrantes chinos, mientras que otras poblaciones indígenas viven apartadas en las montañas del interior, donde aún preservan sus costumbres y tradiciones ancestrales de cazadores y recolectores. El aventurero también pueda encontrar en algunas de sus aldeas el espacio para rezar o meditar y hallar la paz y la energía espiritual anhelada en uno de sus misteriosos templos. A su vez a lo largo de la costa norte de Borneo, Palau Labuan y sus seis pequeñas islas que forman un parque marino con una extraordinaria fauna y flora, ofreciendo la posibilidad de bucear alrededor de restos de naufragios y otros vestigios de la Segunda Guerra Mundial que también se disputó en el Sudeste asiático.
Indudablemente, Borneo cuenta además con lugares especiales en los estados de Sabah y Sarawak en Penang y Malaca, hasta la fecha casi vírgenes y que han sido declarados por ello como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; así como también el Géopark de la isla de Langkawi, y el Taman Negara National Park (Pehang), el Parque Nacional de Kindala lugares que en conjunto están protegidos por la National Geographic Society. En la isla de Borneo, “turismo” es sinónimo de naturaleza, de fascinante aventura, de paraíso submarino y de múltiples actividades recreativas relajantes, lo que convierte a la región en un verdadero mosaico ecológico y cultural no solo para el trotamundos, sino también para el viajero con altas expectativas en cuanto a hazañas y maravillas naturales.
Sin embargo y con el paso de la era moderna han ocurrido algunos cambios y transiciones y lamentablemente aún en las regiones más remotas del mundo, como lo es Borneo, una vez más encontramos algunas de las acciones dañinas y amenazas muy comunes que ponen en peligro la belleza natural y ejemplos de ello son la tala inmoderada de árboles, los incendios forestales provocados por descuido, la caza furtiva o simplemente la sobreexplotación de alguna especie o de varias de ellas. Las barbaridades del mundo contemporáneo parecen a veces un reflejo del pasado, o como lo expresaba el poeta inglés John Milton, quién ya advertía en su muy aclamado poema “El Paraíso perdido” (1667) sobre las consecuencias de las malas acciones y el consecuente sufrimiento humano. En otras palabras, aún queda tiempo para reflexionar sobre nuestras acciones y más sobre nuestra responsabilidad colectiva hacia nuestro entorno natural o poniéndolo más fácil con un ejemplo tangible: si los muchos viajeros que nos visitan en la bella Sudcalifornia nos envidian por literalmente vivir en un “Paraíso terrenal”, realmente entonces nosotros estamos tomando con suficiente consciencia nuestra responsabilidad hacia nuestro entorno natural?¿Estamos cuidando seria y responsablemente de nuestro patrimonio natural para futuras generaciones?...
Po último y regresando a Borneo, que también enfrenta los retos y peligros de la civilización moderna y del progreso mismo, hay un ejemplo concreto y razones para abrigar esperanzas de que las medidas de conservación puedan funcionar, como cuando en este caso particular tres países (Brunei, Malasia e Indonesia) colaboran activamente, bajo un acuerdo para trabajar juntos en beneficio de su pueblos y de sus recursos naturales y para proteger y manejar de forma sostenible los 22 millones (!) de hectáreas que componen una de las zonas más silvestres y prístinas del mundo para así poder re-encontrar “Un Paraíso Perdido: Borneo”…
P.S. Increíble vídeo sobre la isla https://www.youtube.com/watch?v=86OFJwkbzXU
http://www.lareserva.com/home/borneo_+paraiso_de_biodiversidad_