Familias sudcalifornias: ¿MADRES INVASORAS?
Existen diversos estudios de psicología que señalan que cuando el padre está ausente o es indiferente, la madre se vuelve invasora, o más proclive de establecer una relación tóxica con sus hijas o hijos.
¿Qué queremos decir con una madre invasora?
Bueno, las madres invasoras son aquellas que están preocupadas siendo papá-mamá a la vez, y esto muchas veces ocasiona que sobreprotejan a los hijos, no les permitan tener vida privada, se depriman si ellos las dejan y quieren que se les consulte en cualquier decisión.
Este tipo de madres son muchas veces débiles emocionalmente y depositan en sus hijos deberes o responsabilidades que no le corresponden, si los hijos reclaman vida independiente ellas usarán la culpa como medio de chantaje. Ellas dicen sentirse muy solas y les recuerdan a todo momento el sacrificio que han hecho por ellos.
Los hijos suelen desarrollar actitudes que dan sustento a este comportamiento, como por ejemplo: Se sienten culpables de la vida que llevan, de la gente que los rodea y, muchas otras veces, hasta de ser feliz si se separan de la madre. Necesitan estar junto a ella sobreprotegiéndola y se exigen demasiado para cumplir con las expectativas maternas.
Si bien es cierto que no existe una madre ideal y que las circunstancias las han llevado por dónde han podido, este tema puede volverse un verdadero conflicto; la buena noticia es que seguramente, este tipo de dinámicas poco sanas, pueden ser superadas con ayuda profesional. Y claro, también debemos poner de nuestra parte para iniciar el cambio.
¿Cómo hacerle frente?
Si eres hijo:
- La respuesta a todo esto es colocar límites. Los límites no siempre son malos, de hecho especialistas dicen que las personas que tienen establecidos límites tanto en su trabajo como en su vida personal, logran ser más seguras de sí mismas.
- Tener buena comunicación con tu madre, explicarle lo que sientes.
- Tratar de descubrir cosas solo y después mostrárselo.
Si eres madre:
- Intenta no transferirles a los hijos actividades que no les corresponden.
- Comprende que el dolor o todo lo que has pasado pueden ser útiles como ejemplo para la vida de tus hijos.
- Escucha a tus hijos sin interferir.
- No supongas que los deseos de los hijos son los mismos que los tuyos.
- Ayudar a tus hijos a ser independientes y a que descubran cosas por ellos mismos.
Como todos los temas que abordamos y que lo ameritan, siempre es necesario recalcar, que pedir ayuda profesional es el primer paso de cualquier cambio de conducta o de salud.
