Familias sudcalifornias: CÓMO HABLAR DE LA MUERTE CON NUESTROS HIJOS
Dentro de las muchas cosas que algún día tocará hablar con nuestros hijos, está el tema de la muerte; un tema que a muchos les sorprenderá y tratarán de sacarle la vuelta, pero tendrán que hacerlo si no quieren que su hijo o hija se formen una idea errónea de éste concepto. Nosotros como adultos podemos decir que es un ciclo que termina, como el alfa y el omega, pero la explicación de éste tema que le demos a un niño, puede variar dependiendo del lugar donde vivimos, la educación, creencias, costumbres y religión.
El tema de la vida y la muerte es más común de lo que parece, la muerte se hace presente de diversas maneras como en la televisión, la dibujos animados, libros, la muerte de mascotas, de insectos, en juegos o comentarios que el niño escucha, etc. tal vez cuando hablemos de ello con nuestros hijos estén más preparados de lo que como padres creemos; los niños son muy listos, y conforme van creciendo van captando y analizando el comportamiento de los seres a su alrededor.
El doctor Earl A. Grollman, en su libro “Explicando la muerte a los niños” dice que la muerte se puede explicar mejor con términos muy sencillos. Él manifiesta que se debe hacer hincapié en "cuando las personas se mueren, ya no respiran, no comen, no hablan, no piensan y no sienten, tal como lo hace una plantita que se marchita o un animalito".
Uno de los puntos que ayuda mucho a las y los niños a entender este concepto, es cuando tienen una mascota, éstas son importantes para crear un ambiente de tranquilidad, autoestima, fidelidad, amor; así como el conocimiento de diversos temas como la salud, el sexo y la reproducción, el crecimiento, el dolor y la enfermedad. Cuando la mascota del niño llega a morir, podemos decir que ellos también pasan un proceso de duelo, el cual asimilarán según su edad y conocimiento.
Es importante que en el caso de que fallezca un familiar o amigo, no ocultemos los sentimientos ni tratemos de fingir que no pasa nada, ya que los niños al percibir esto, aprenderánde que la muerte conlleva un proceso de dolor, tristeza y que con un tiempo se puede reponer. Otro punto importante es que cuando le expliquemos este tema a nuestros hijos no utilicemos frases como “cayó en un sueño profundo” o “descanso eterno”, ya que los niños lo pueden interpretar como si la muerte fuera como un sueño y podrían ocasionar que al niño le de miedo dormir o tenga pesadillas. Debemos utilizar un lenguaje claro, sencillo, preciso, sin herir sus sentimientos o expresiones, que vean que estamos dispuestos al diálogo con ellos, a no dejarles dudas.
Entre los cinco y los nueve años de edad, la mayoría de los niños comienzan a darse cuenta de que la muerte es algo definitivo y que todos acabamos muriendo, aunque abrigan la idea de que, de alguna manera, pudiéramos escapar de ella con un poco de imaginación. A estas edades, los niños asocian la muerte con un esqueleto o con un ángel, y algunos de ellos llegan a sufrir pesadillas. A partir de los nueve o diez años de edad y durante la adolescencia, los niños ya son más maduros y empiezan a entender plenamente que la muerte es irreversible, por lo tanto, ya cada quien se va formando una idea propia de lo que es la vida y la muerte.
A continuación les compartimos un cuento que nos ayudará a explicar este difícil proceso:
Tomado del canal de Youtube Cuentos Infantiles. Cuentos y Perdices