Felicidad
(Mi) Felicidad es…
Un vaso de agua fría en la canícula de tu cuerpo sediento.
Un libro en las horas de espera imaginando que entras por mi puerta para hojearnos, leernos (mutuamente) y disfrutarnos.
Correr kilómetros y kilómetros sobre la arena de la playa sabiendo que me piensas, escuchando la canción que me dedicaste la fría noche de diciembre en aquella fiesta.
Un mensaje tuyo a deshoras de la madrugada escrito con la viscosa e indeleble tinta transparente de tu cuerpo.
El silencio en la cima de la montaña después de desahogar en un grito todas mis ansias.
Una cerveza contigo en la barra de mi bar favorito rozándonos la piel con la mirada, deseando –nos- hasta el último trago.
Una pluma fuente tinta negra con la que escribirte una carta, entregártela en persona y leerla en voz alta.
El tatuaje que tus labios dejan en mi pecho, muslos, cuello y vientre. En pocas palabras en todo mi ser inerte.
Las tardes que pasamos juntos en el sillón de tu casa hablando sin palabras mientras el resto de la gente dormita insospechada.
Nadar desnuda en las aguas frías de un mar agitado.(Mientras) tú, sonriente observando.
Hacer el amor sobre las dunas casi desiertas con el sol como sábana cubriendo nuestros cuerpos lúbricos. A lo lejos escuchar el murmullo del motor de una lancha.
El café negro sin endulzar -amargo- en la cama. Mientras me lees la poesía de Alí Chumacero y en el ambiente tiritan las notas azules de Louis Amstrong.
Un domingo al ser despertada por tus torpes dedos que tocan mis labios secos y que al ir avanzando se humedecen dispuestos.
Encontrarnos bajo el agua tibia de la regadera en el estrecho sendero que me habitas.
Los rastros de tus besos en mis labios –ahora resecos y agrietados- prueba fehaciente de tu boca en mí.
Escuchar la canción que fue y sigue siendo nuestra en la respectiva soledad de las noches en vela.
Es saberte, pensarte, desearte a pesar de lo inexorable del tiempo. La infranqueable distancia. Lo inasequible de este sentimiento.
(Mi) Felicidad son cruentos y efímeros momentos. Irrepetibles también.
(Mi) Felicidad al fin y al cabo.