Mitos, cuentos y leyendas de sudcalifornia: EL ORIGEN DE LA PALABRA "CALIFORNIA"
Por allá del año 1533, de las costas de Santiago, España, salieron dos barcos llamados Concepción y San Lázaro, en busca de nuevos territorios para la corona de los reyes católicos. Una de estas naves fue piloteada por Fortún Jiménez Bertadoña, quien encabezó un motín en el que resultó asesinado el capitán Diego Becerra. Para salir impunes de su castigo y como estrategia para esconderse, decidieron seguir viajando, amotinados y sin rumbo, por el mar, hasta que llegaron por primera vez a las costas de la península de lo que hoy es Baja California y Baja California Sur.
Cuando estos criminales desembarcaron en nuestras playas, después de recorrer lo que hoy es la bahía de La Paz, encontraron criaderos de perlas y recibieron algunas como obsequio por parte de los indígenas que habitaban ahí. En un enfrentamiento contra los pobladores originarios varios perdieron la vida, incluso el propio Fortún Jiménez, por lo que los sobrevivientes tomaron sus botes y se fueron rumbo a la costa de la actual Sinaloa, donde comenzaron a contar los tesoros y riquezas que habían descubierto.
La noticia fue chisme y recorrió los oídos de todos los españoles colonizadores, y cuando llegó a Hernán Cortés, éste se decidió a organizar una expedición a las tierras míticas que se rumoreaban. El 3 de mayo de 1535 llegó al sitio que habían visitado los piratas y decidió bautizarlo “Bahía de la Santa Cruz” y tomarlo como suyo, fumando una colonia más. La hostilidad del ambiente junto con las agresiones de los nativos que se resistieron a la dominación y que recordaban todo lo que les hizo Fortún, hizo que esta colonia se deshiciera abruptamente.
Durante los años siguientes, esta nueva tierra fue visitada por muchos exploradores y recibió distintos apodos:
—Sebastián Vizcaíno la llamó “Nueva Andalucía”
—Pedro Cassanate le quiso poner “Nuevo Reino de Aragón”
—Isidro Atondo y Antillón trató de bautizarla como “Nuestra Señora de la Trinidad”
—El padre Kino y el padre Salvatierra optaron por el apodo de “Islas Carolinas”
Sin embargo, al final el nombre que adoptó fue el de California.
Un par de años después de la visita de Cortés, comenzó a llamársele California a este territorio, sin saber exactamente el origen de esa palabra ni el inventor de tal apodo. En 1540 ya existen registros del explorador Francisco de Ulloa, que se refería a nuestra península con este nombre. Por mucho tiempo se creyó que el significado de la frase en latín calida fornax, que significa horno caliente, se lo había puesto Cortés, pero no fue así.
Por mucho tiempo se estuvo investigando, creando hipótesis y rastreando el origen de esta palabra, que causó mucho problema para historiadores y cronistas, que discutían por la etimología sin ponerse de acuerdo.
Por fin, en el año de 1862, un investigador norteamericano llamado Edward Everett Hale, rastreó el origen de tan singular palabra: su primera aparición data del año 1510, en el famoso libro de caballería Las sergas de Esplandián, continuación del libro aún más famoso titulado Amadís de Gaula de Garci Ordoñes de Montalbo, en el que narra que la california era una isla mítica, habitada por mujeres negras con un modo de vida similar al de las amazonas, es decir, rebeldes y fuera de la mano dominadora de cualquier varón que quisiera quitarles su libertad.
En la actualidad, se cree que Garci Ordoñes tomó el término de una antigua epopeya francesa llamada La canción de Rolando, que data del siglo XI, en el que se canta, cuando muere el hijo del rey Carlomango, una exclamación que dice: “¡Ha muerto mi sobrino, aquél que tantas tierras me hizo conquista! Se rebelarán […] tantos pueblos malditos, y los de Apulla y todos los de Palerma, los de Africa y los de Califerna.” Califerna, supuestamente, era parte de los sitios disputados por los turcos que luchaban en contra de la invasión cristiana, y recibieron el apoyo de la reina Calafia y sus amazonas californias, montadas en sus grifos (caballos alados), quien enamoró a su enemigo cristiano Esplandián, hijo de Amadís de Gaula, con un amor que los llevó a casarse en lugar de asesinarse en la guerra.
¿Qué opinas? ¿Crees que este sea su origen más antiguo o que haya sido utilizado con anterioridad? ¿Quién crees que bautizó nuestro estado?
La información de esta nota ha sido tomada del libro de Mitos, Leyendas y Tradiciones Sudcalifornianas del prestigiado escritor Leonardo Reyes Silva, publicado en el año 2005.
