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Personajes Célebres Sudcalifornios: MODESTO C. ROLLAND MEJÍA

Escrito por Eligio Moisés Coronado en Viernes, 15 Julio 2022. Publicado en Historia, Narración, Personajes Célebres Sudcalifornios

UN SUDCALIFORNIO SOBRESALIENTE*

 

Modesto C. Rolland Mejía nació en La Paz, Baja California Sur, el 14 de junio de 1881. Cursó los primeros estudios en La Paz y Sta. Rosalía. En Culiacán, Sinaloa, estudió y obtuvo el título de profesor de Instrucción Primaria.

Emprendió enseguida la carrera de ingeniero civil, que terminó en tres años en vez de los cuatro del plan de estudios; se recibió en 1906, y desde el año anterior fue profesor de la clase preparatoria de Topografía, Drenaje y Riego en la Escuela Nacional de Agricultura y Veterinaria. En ese tiempo publicó Algunas Lecciones sobre el Levantamiento de Polígonos por Deflexiones y Lecciones sobre Presas, dadas en la clase de Topografía, Drenaje y Riegos.

Propuso e impartió las “Academias Libres de Concreto Armado”, primeras clases de concreto en México. Editó su Manual de Elementos de Cálculo para Cemento Armado; construyó innumerables residencias particulares, el acueducto Xochimilco-México y, en Paseo de la Reforma 96, una obra con claro de 22 metros.

Organizó un Club de Ingenieros para  estudiar los problemas del país, donde propuso, entre otras, la nacionalización de los ferrocarriles y el establecimiento del ahorro postal. Presidió, con Emilio Vázquez Gómez, Francisco I. Madero, Félix  Palavicini, Aquiles Elorduy, Roque Estrada y Eduardo Hay el Centro Nacional Antireeleccionista, que sería partido nacional; suscribió, como uno de los socios fundadores, el Manifiesto a la Nación publicado al iniciar su campaña electoral el Partido Antireeleccionista. Presidió el Club Antireeleccionista “Francisco Díaz Ramírez”. El subsecretario de Comunicaciones Manuel Urquidi lo invitó a organizar esa dependencia. Luego del asesinato de los señores Madero y Pino Suarez, el ingeniero Rolland se despidió de sus alumnos del Colegio Militar diciéndoles que serian instrumentos para derramar sangre mexicana, y esa misma tarde fue destituido, sacado de su oficina, encarcelado y amenazado con fusilarlo. Tras un mes de confinamiento solitario lo recibió el ministro Manuel Garza Aldape, a quien le aseguró que no era conspirador, pero que estaba en desacuerdo con las prácticas del huertismo. Salió en libertad y decidió embarcarse en Veracruz hacia los E.U.A.

   El ministro de Comunicaciones de don Venustiano Carranza lo presentó al presidente, a quien le habló de los problemas de México, señalándole que el asunto agrario era la piedra angular de los problemas sociales del país. Le habló sobre todo de la educación y la necesidad de crear un sistema escolar. El ejecutivo lo comisionó a viajar por los E.U.A. con la finalidad de elaborar planes para la reconstrucción, pero en especial para organizar el sistema educativo elemental y la administración municipal. Poco después recibió el nombramiento de cónsul en Nueva York, comisionado para crear órganos de difusión de la política carrancista. Elaboró artículos para revistas y un boletín semanal que se enviaba a 500 periódicos y autoridades de los E.U.A. De regreso a México fue nombrado oficial mayor de la secretaría de Comercio. El consejo directivo de los Ferrocarriles Nacionales lo nombró consejero, y pronto fue designado ministro de Comunicación del gobierno de Carranza. Dictó una Conferencia en Veracruz a la Confederación Revolucionaria, titulada “la Cuestión Agraria y Medios Prácticos para Resolver el Problema”. Renunció al gabinete y fue comisionado como secretario de la Comisión Técnica del Petróleo, con Pastor Rouaix como presidente; el grupo viajó a los E.U.A. a estudiar la industria petrolera.

   Rolland, Salvador Alvarado y otros lanzaron la convocatoria a constituir la Confederación Revolucionaria para la organización como corolario de la victoria armada. Ese año acompañó a Yucatán a Salvador Alvarado, nombrado gobernador, quien lo comisionó para organizar  la Comisión Estatal Agraria, creó el Catastro Rural Agrario y reeditó su libro de topografía. En dicho Estado construyó el primer muelle de concreto para la terminal de petróleos del puerto de Progreso. Promovió el apoyo de las maestras para que el gobernador confiriera el sufragio a las mujeres. En Yucatán lamentó públicamente el poco provecho en México de la explotación petrolera (a pesar de que era el tercer productor mundial) y la desaparición de la Comisión Técnica del Petróleo que preparaba leyes para proteger este patrimonio. Recomendó la nacionalización del petróleo y la construcción de oleoductos y refinerías en todo el país. Solicitó al secretario de Educación un profesor que fungiera como jefe del departamento de Educación Pública en Yucatán, y logró el nombramiento del ilustre maestro colimense Gregorio Torres Quintero. Ante una inminente guerra con los EUA por el conflicto que provocó la “Expedición Punitiva”, la “Unión Americana Contra el Militarismo” invitó a Modesto C. Rolland, Luis Manuel Rojas y Gerardo Murillo (el Doctor Atl), a una conferencia de paz en El Paso, Texas, que luego se instaló en Washington como la “Comisión de Paz Interamericana”, con un representante estadounidense como presidente, y de vice presidente Modesto C. Rolland. Ante actitudes intransigentes de los angloamericanos publicó una carta abierta al presidente de esa nación señalando la grave injusticia que significaría una guerra contra México. Más tarde se publicaron en Nueva York El Gráfico y Colombus Publishing, dirigidos por Modesto Rolland, creador de la Latin American News Association del gobierno de Carranza. En Nueva York conoció las teorías de Henry George sobre un impuesto único que gravara sólo la tenencia de la tierra, leyó sus libros, se convirtió a su causa y asistió al “Congreso del Impuesto Único”.

   Propuso a don Venustiano soluciones para el distrito Norte de la Baja California, y le solicitó que se enviara una comisión ejecutiva para su estudio. Un comité formado por Salvador Alvarado, Ezequiel  A. Chávez, Max Chaubert, Pedro Solís Cámara y Modesto C. Rolland presentó al Congreso Constituyente el proyecto de ley del Servicio Civil para las Ciudades Mexicanas. Modesto C. Rolland y Eduardo S. Carrillo fueron diputados propietario y suplente por el distrito Sur de la Baja California. El sudcaliforniano publicó un extenso estudio sobre la situación hacendaria de Yucatán. Como gerente de la Compañía de Fomento del Sureste de México logró dotar de comunicación inalámbrica al estado de Yucatán. Cuando Salvador Alvarado intentó figurar en las elecciones presidenciales fundó el diario El Heraldo de México y nombró a Modesto Rolland como director (1919–1920).

   Rolland encabezó una comisión de la secretaría de Hacienda para estudiar las condiciones del distrito Norte de la Baja California; el reporte resultó un análisis preciso de la situación económica y política de esa porción peninsular con varias propuestas de soluciones, entre otras la creación de un puerto en la Laguna Salada. También recomendó la construcción de varias presas, de las que sólo se construyó la “Abelardo Rodríguez”. Redactó el decreto para la creación de los Puertos Libres que expidió el presidente Adolfo de la Huerta. Presidente  de la Comisión Nacional Agraria nombrado por el gobierno del general Obregón, donde elaboró el proyecto para fijar la extensión de las dotaciones ejidales. Publicó El Desastre Municipal en la República Mexicana, con prólogo de Manuel Gómez Morín, primer libro escrito en México sobre el municipio libre, que incluye el Proyecto de Ley del Servicio Civil para Ciudades Mexicanas.

   Fundó el periódico El Hombre; publicó una obra sobre Cimientos, Pisos y Techos de Cemento Armado; escribió Los Puertos Libres Mexicanos y la Zona Libre en la Frontera Norte de la República Mexicana. Presidía la radiodifusora CYB cuando se fusionaron la Liga Mexicana de Radio, el Centro de Ingenieros y el Club Central Mexicano de Radio para formar la Liga Central Mexicana de Radio; el señor Rolland fue su fundador y  presidente; entre sus dirigentes figuraba Vicente Lombardo Toledano. Representó a la LCMR ante el presidente Obregón, al proponerle la reglamentación de radioemisoras. Organizó la Gran Feria Radioeléctrica en el Palacio de Minería. Representó a los Puertos Libres Mexicanos en el segundo Congreso Nacional de Ingenieros, en Monterrey, Nuevo León. El presidente Obregón lo nombró director de Puertos Libres Mexicanos. Heriberto Jara, gobernador de Veracruz, lo contrató para construir un gran estadio en Jalapa; la obra quedó terminada en dos meses y dieciséis días ante el estupor de especialistas de todo el país, por el techo volado de más de 3,000 metros cuadrados que cubre la gradería.

   Su esposa Virginia de la Garza Meléndez, con quien contrajo matrimonio en 1908, falleció diecisiete años después en un accidente de tránsito, y dos años después se casó con la concertista Rosario Tolentino Guízar. En total tuvo 6 hijos.

   Cuando por decreto del presidente Calles desaparecieron los Puertos Libres Mexicanos, en su carácter de director, don Modesto entró en una larga polémica contra ese decreto, y en esta época se reintegró a la construcción de viviendas y edificios en la ciudad de México; entre éstos construyó el Foreign Club de México, residencia que sería de la Embajada Rusa, y en Cuernavaca el hotel Chula Vista. Entre 1912 y 1926 registró 11 patentes de su inventiva. Montó una planta para producir tabicones huecos y otros productos prefabricados, construyó y vendió una bomba de agua movida con energía eólica. Fue editor de Revisión, órgano de la Unión Georgista en la ciudad de México. Director de Vías Férreas de la secretaría de Comunicaciones, desde donde emprendió la construcción del Ferrocarril del Sureste. Dictó una conferencia sobre el tema agrario en México ante la fundación “Henry George de América”, durante su Congreso en San Francisco, California. Abrió una mina para explotación de cobre en el poblado “Las Minas” ubicado en una barranca cerca de Jalapa, Veracruz. (En este lugar había nacido José María Garma González en 1903.)

   Escribió Comunismo o Liberalismo, dedicado a la Unión de Veteranos de la Revolución, en el cual reseñó el fracaso del laborismo y el agrarismo para lograr el bienestar público. Fue nombrado subsecretario de Comunicaciones. En mayo de ese año se formó en Jalapa la compañía petrolera La Laguna, de la que el ingeniero paceño fue accionista. Con éste como presidente quedó fundada la Compañía Petrolera Veracruzana. Ofreció una conferencia ante el Congreso Nacional de Exportadores, en el Palacio de Bellas Artes, con el tema de puertos libres mexicanos. Como subsecretario de Comunicaciones y Obras Públicas le correspondió firmar el decreto presidencial de reinstalación de los puertos libres mexicanos junto con el presidente y el secretario de Hacienda. Al renunciar el general Francisco J. Múgica a la SCOP para hacer campaña hacia la búsqueda de su candidatura a la presidencia del país, don Modesto renunció como subsecretario y le fue encargado el despacho de la subsecretaría de Economía. Con este carácter firmó, al lado del presidente de la República, el convenio y acuerdo de pago a cuatro empresas petroleras expropiadas por decreto de 18 de marzo de 1938, que destrabó el bloqueo extranjero al petróleo mexicano. Fue gerente de Puertos Libres Mexicanos hasta la llegada del presidente Adolfo Ruiz Cortines. En Puertos Libres desarrolló el proyecto de la Decavía, que proponía transportar barcos de hasta 25,000 toneladas sobre diez vías dentro de esclusas viajeras, con recorrido de 188 kilómetros entre Salina Cruz y Coatzacoalcos, venciendo 220 metros de altura. Proyectó y construyó una draga fija, única en el mundo, que constantemente dragaría las arenas del arrastre litoral que bloquean Salina Cruz. Durante su gestión en Salina Cruz se realizaron obras de pavimentación citadina y dotación de agua potable y drenaje a la población.

   En 1941, Neguib Simón se propuso construir una Ciudad de los Deportes con plaza de toros, estadio, cines, frontón, canchas de tenis, boliches, restaurantes, alberca olímpica, alberca con mecanismos para simular olas, arena de box y lucha libre y estacionamiento. Contrató al ingeniero Rolland para proyectarla y construirla, y los trabajos se iniciaron en diciembre de 1944, llegándose a emplear hasta 10,000 trabajadores en tres turnos. La novedad era que el ruedo estaba a 20 metros bajo el terreno natural, y las graderías más altas 20 metros arriba, con lo cual se logró duplicar la capacidad de las plazas más grandes del mundo. La obra se inauguró el 5 de febrero de 1946, aunque los escépticos obligaron un mes antes a una  prueba de carga de diez días, con 120,000 sacos de arena de 50 kilogramos cada uno, con que cubrieron todos los asientos. Pasada exitosamente la prueba, el proyecto continuó con el estadio olímpico que fue inaugurado el 6 de octubre de 1946; fue el primer gran foro para espectáculos deportivos, de componente diferente a la madera, en la ciudad de México.

   El presidente Manuel Ávila Camacho  lo nombró representante del ejecutivo federal y presidente de la Comisión Coordinadora del Suchiate, en Chiapas. En atención a la encuesta de Adolfo Ruiz Cortines, candidato a la presidencia del país, ofreció su “Efectiva manera de evitar la miseria pública y combatir el comunismo”. Desnudó los problemas nacionales haciendo ver que no se había resuelto la miseria pública, el desastre del agrarismo, el laborismo creador de clases privilegiadas sin atender los problemas de los trabajadores; y el conflicto electoral ya que los puestos de elección popular no habían sido para los mexicanos mejores y más preparados, y sin poner remedio al desastre municipal. Planteó finalmente las necesidades de la reforma económica, el respeto a la libertad municipal, la elección proporcional y los candados democráticos llamados revocación, iniciativa y referéndum, así como cesar disposiciones arbitrarias en la política ejidal.

   Con el titular de la secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, Carlos Contreras, ideó y proyectó el concepto original del Centro SCOP, ubicado en una gran área de la ciudad de México. Se trasladó a su rancho Santa Margarita, ubicado a orillas de la ciudad de Córdoba, Veracruz. Invitado a acompañar al licenciado Adolfo López Mateos en su campaña como candidato a la residencia de la República, durante su campaña por la península de Baja California. En 1962, la Cámara Nacional del Cemento declaró que los precursores del concreto en México fueron los ingenieros Manuel Marroquín y Rivera, Miguel Rebolledo, Modesto C. Rolland y Ángel Ortiz Monasterio.

   El ingeniero Modesto C. Rolland Mejía falleció en Córdoba, Veracruz, el 17 de mayo de 1965, a los 84 años de edad y al término de una existencia fructífera en bien de México.

 

* Síntesis de Eligio Moisés Coronado en base a la biografía escrita por Justin Castro y Jorge M. Rolland C. en http://modestoroland.blogspot.mx/

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