Recomendación fílmica: EL CABALLO DE TURÍN
La recomendación fílmica de la semana es la película húngara “El caballo de Turín” (A Torinói ló como título original en húngaro) es una película de 2011 dirigida por Béla Tarr y Ágnes Hranitzky. Fue premiada con el Gran Premio del Jurado en el Festival de Berlín de ese mismo año, Premio Internacional de la Crítica Fipresci.
La película se inspira en cierto episodio de la vida del filósofo Friedrich Nietzsche. Turín 3 de enero 1889, Nietzsche sale de su casa, en el camino se da cuenta que un cochero lucha con su caballo, que no quiere obedecer, el hombre pierde la paciencia y comienza a azotar al animal. Nietzsche se acerca y trata de detener la brutalidad de los golpes con su propio cuerpo. El filósofo quedó impresionado por la violencia del hombre y de su voluntad de dominar el mundo. El inicio de la película se enlaza a esta anécdota preguntándose cual podría haber sido el destino del animal.
La película se divide en seis partes que se corresponden a igual número de días consecutivos en la vida de los protagonistas, (según declaró su director la ausencia de un séptimo día se debe a que dios descansó después de los seis días que dedicó a la creación del mundo), durante los cuales se repiten más o menos las mismas acciones de su vida cotidiana.
Los dos protagonistas están casi constantemente en silencio. Las palabras cobran importancia cuando intervienen agentes externos. Una voz, fuera de escena se inserta esporádicamente para comentar los hechos.
La banda sonora está constituida por una sola pieza musical que se repite en varios momentos de la película.