Recomendación fílmica: LA ODISEA
L’odyssée es una película francesa que se estrenó el fin de semana pasado en las salas de cine de La Paz, este filme retrata la vida del retirado piloto aviador Jacques-Yves Cousteau, principalmente en su faceta de buzo, y cómo junto a su familia emprenden el viaje soñado, en la cual literalmente hacen de un barco su casa, y recorren el mundo explorando y conquistando los mares mientras sueñan con el hecho de que el hombre pueda vivir bajo el agua; como bien lo dice Cousteau, mientras americanos y rusos trataban de conquistar el espacio, los franceses conquistarían los mares y océanos. En esta cinta vemos cómo el protagonista logra de a poco su cometido, cueste lo que cueste, haciendo investigación para petroleras, filmando películas y documentales, tanto para exhibición en festivales y compañías de televisión americanas, todo por conseguir el sueño de su vida, el cual cada vez alejaba más a su familia.
Y es que como lo dice Jacques Cousteau en la película, sus películas (así como esta) no trataban sobre la vida en el agua, sino de personas descubriendo cómo es la vida en el agua, y eso es este filme; también muestra lo que batalló Cousteau para hacer de su sueño una odisea (me parece el título no es tan adecuado, pues en automático se puede confundir o entrelazar con La Odisea de Homero) y cómo lo consigue. Y es que, aunque la película trata del mar y de la relación con su familia, así como de la personalidad de Cousteau —cada vez más ambiciosa—, y del papel del hombre frente a la naturaleza (al ver cómo el mar con los años ha cambiado por el hombre y su codicia por mas petróleo, la contaminación desmedida en todos los tipos posibles), sobre todo la película va más sobre la relación del protagonista como padre con su hijo pequeño, lo cual la hace en automático una película dramática; al principio se comprende que el hijo siente un recelo hacia Cousteau, por el hecho de haberlo dejado en un orfanato a él y a su hermano mayor, mientras los padres disfrutaban de sus primeros años de gloria y maravilla, ya cuando crece lo hace parte de su equipo, y sin duda se siente el apego que tiene más por él que por su hijo mayor que en realidad no tiene peso relevante en la historia hasta el final, entonces al ver Phillipe, su hijo menor, cómo su padre ahora se movía más por el dinero, que por el amor al mar, decide separarse de él, además de eso por el hecho de que su padre no autorizaba que él volara, sueño que había sido heredado precisamente por su padre; así que crea su propia organización que documenta la vida de las ballenas, no es hasta que un trabajo vuelve a unir a toda la familia, limando toda aspereza que hubiera podido hacer, y esa tarea los lleva a crear una fundación para salvar lo que tanto amaban: La Mer.
Y si algo hay que destacar de esta producción, sin duda alguna es la fotografía, y con esto me refiero al trabajo que hacen bajo el mar, es una belleza en la que no se pierde nada, ningún detalle, nada sobra, nada falta, nada se ve forzado, la película a pesar de ser francesa, me parece tiene la estructura de una película americana, vamos, no me parece que tenga el sello distintivo del cine francés, pues no siento que se tome riesgos en lo narrativo, es una película convencional, a pesar de estar hablada en este idioma, y no quiero decir que eso signifique algo negativo, simplemente que para un amante del cine francés, como su servidor, me pareció raro y sentí que algo me faltó. (Además del hecho de que esta dura poco más de dos horas, que no se siente tan pesada la película, pero si hubiera sido una película de una hora cuarenta, la película nos hubiera dicho lo mismo). Las actuaciones son notables, Lambert Wilson como Jacques Cousteau, Audrey Tautou que es quizá una de las exponentes más importantes del cine francés contemporáneo como la esposa de Cousteau, que siendo honestos me hubiera gustado un poco más de la participación de ella, pero claro se corría el riesgo de que quitara protagonismo a los principales, y por eso es comprensible el hecho de que no figurara tanto, sin embargo es notable, y más notable aun me parece el joven Pierre Niney como Phillippe.
A la memoria de este buzo, oceanógrafo, inventor, explorador, visionario y biólogo marino se le tiene mucho respeto y cariño en Baja California Sur, ya que declaró al Mar de Cortes como "El Acuario del Mundo", tal así es la figura de este hombre que en el malecón de nuestra ciudad se encuentra una figura en su honor. Así que si quieren conocer más sobre la vida de este personaje que fue el señor Cousteau, y les gusta el mar, la película es por demás recomendable.