Recomendación fílmica: UNA BELLA LUZ INTERIOR
Una Bella Luz Interior es la película más reciente de la directora francesa Claire Denis. La cinta cuenta cómo la vida de una pintora llamada Isabel, recién divorciada, con casi cincuenta años y que busca el amor verdadero en cualquier lugar que puede, se frustra cuando el amor no llega a su vida como ella lo idealiza. Isabel va y viene con su ex- esposo, se vuelve amante de un banquero que la ayuda a exponer su obra en una galería, se enamora de un joven actor indeciso con el cual no puede hablar, se junta con un hombre con quien baila en un bar, intenta tener algo con el asistente de la dueña de la galería donde expone, y a pesar de todo eso el amor simplemente no llega, o al menos no el amor que la cultura pop y las películas francesas nos dicen que es.
La película es una propuesta muy interesante, diferente a cómo se puede hacer hoy día una comedia romántica, o si gustan llamarlo así, una comedia llena de humor oscuro anti-romántica, ya que mientras creemos ver a esta mujer encontrando el amor, en realidad lo que vemos es un completo fracaso tras fracaso de esa búsqueda, ya sea por valor propio, por auto sabotaje, o por lo que le dicen los demás a pesar de lo que ella pueda estar sintiendo.
Debo decir que la película se torna muy lenta en extendidos periodos, con diálogos largos en los que en realidad es difícil a veces descifrar o seguir lo que quieren decir realmente los personajes, y aunque es adaptada de una novela por la misma directora y Christine Angor, pareciera que hicieron una obra de teatro y la filmaron.
Constantemente vemos close-ups y tomas muy cerradas en los rostros y facciones de los actores, más hacia nuestra protagonista, que honestamente les he de decir que si no fuera porque la protagonista es Juliette Binoche quizá sí me hubieran molestado un poco. Y hablando justamente de esto, un par de detalles: el primero es destacar la fotografía y el valor que yo considero aporta a la película y su historia, y cómo encontramos un reflejo de esta en la trama, ya que en un principio se torna muy oscura en los tonos que se manejan en escenografía y el diseño de producción, entonces cuando se ve a Isabel ilusionarse, o creer que por fin ha encontrado eso que ella busca, la fotografía se torna más luminosa; y cuando vuelve a caer en desilusión, vuelve a ser todo el entorno grisáceo. La música de la película es bella, sutil y delicada. Y bueno, por la trama en sí, todo el desarrollo evocaría a alguna película de Woody Allen, y por eso yo le doy más valía todavía. En cuanto a las actuaciones todos tienen un desempeño bueno, pero más que formidable la protagonista que tanto en las situaciones cómicas, de desesperación, de tristeza, frustración, desesperanza, incluso auto flagelo, es más que excelso el trabajo de esta mujer a la que yo admiro tanto y que la veo como los buenos vinos, diría la coloquial frase.
Definitivamente esta es una película a la cual hay que tomarle tiempo y tenerle paciencia, si no disfrutas el cine así o simplemente esperas ver la historia de amor o desamor convencional, quizá te aburra o te enoje, te desespere o simplemente te acabes durmiendo en algunos de estos lapsos de diálogos largos.
Pero sin duda, la propuesta de la directora es interesante y diferente, digna de disfrutarse; es una película donde se habla de cómo vive una mujer que idealiza el amor y cómo a veces los deseos distan mucho de la realidad; esta historia también nos muestra cómo a veces esperamos que todo siga siendo igual que antes, cómo nos estancamos en ciertas etapas, o cómo el mundo cambia mientras las personas estamos metidas en una relación. También vemos un poco, aunque en realidad no es tema central, cómo el hombre percibe el amor en diferentes edades, y la verdadera importancia que le damos a la mujer en la vida amorosa, ya sea como una compañera, o una acompañante; se hace una crítica bastante fuerte me parece, y que bueno.
Una Bella Luz Interior nos habla también de cómo en la desesperación uno recurre a todo por encontrar el amor, por sentirnos amados aunque sea en cortos lapsos, y cómo a veces quisiéramos alargarlos; como a veces sólo deseamos que nos amen, y no exactamente una pareja como tal, y quizá no nos damos cuenta.
Sólo para terminar quiero comentar un par de cosas: la primera es que sólo una vez en la película podemos ver a Juliette Binoche pintar, que dicho sea de paso en la vida real sí pinta, y la segunda es que hacía mucho que no me tocaba que en una película toda la gente se quedara hasta terminar los créditos, pero eso se debe a que mientras los créditos pasan, la película sigue, que es la parte donde vemos al personaje de Depardieu, pero no haré spoilers innecesarios o que arruinen su experiencia.