• werr
  • wer
  • weeee

Recomendación fílmica: POLVO, DE JOSÉ YAZPIK

Escrito por Johnny Antu-Hap en Jueves, 19 Diciembre 2019. Publicado en Johnny Antu-Hap, Cine, Johnny Antu-Hap, Recomendación Cinefila, Recomendación fílmica por Johnny Antu-Hap, Recomendaciones

Polvo es una película mexicana que se acaba de estrenar comercialmente este viernes en salas de cine de todo el país luego de que hace unas semanas se diera su estreno mundial en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM). Ópera prima del ya muy reconocido actor José María Yazpik, quien da el salto a la dirección con una historia de la que para empezar hay que decir que, puede ser todo, menos una película chistosa sobre narcos a lo El Infierno, (y no es que despotrinque contra El Infierno, ya que la película en lo malo de su comedia está también su mayor virtud: las consecuencias de esos actos que vemos chistosos y que al final nos damos cuenta que no lo son tanto) pero déjenme escribirles a detalle.


La película lleva por trama como en un día habitual de chamba, el "manda más" de un tugurio de mala muerte en Tijuana llama a dos de sus hombres, este luego de una historia que sirve para decirles en qué lío están metidos y cual será el destino de uno de los dos, acto siguiente recibe una llamada, este dice que tiene al tipo justo enfrente de él, luego cuelga el teléfono y carga el arma para disparar. Luego de esta introducción, y con la información que se nos brinda después, vemos al Chato, un trabajador de poca monta en este bar que igual sirve como prostíbulo que como expendio de drogas, tiene como tarea regresar a su lugar de origen luego de diez años de ausencia, San Ignacio en Baja California Sur, lugar del que se fue prometiendo que se convertiría en una estrella de Hollywood. Regresa para rescatar lo más posible de un cargamento de droga que cayó del cielo luego de que el piloto de la avioneta que cargaba el cargamento se quedara sin gasolina y esta se estrellara, y lo mandan a él para evitar mandar a un comando que haga un desastre en el lugar, es así que el Chato regresa para salvar a sus padres, pero se ve en su persona que hay algo por lo que no quiere regresar, ese algo es Jacinta, el amor de su vida y a quien dejó para no volver, ahora que vuelve muchas cosas han cambiado y otras no, pero su llegada al pueblo en búsqueda del "polvo farmacéutico" es la que hará que este pierda la calma que tenía, y todo a costa no de las drogas, no de la violencia, no de los narcos, sino por otra cosa que siempre a mantenido hundido al hundido, y que lo hace estar aún más hundido cuando lo tiene: el dinero. Lo que hace que tanto la vida del pueblo y las personas en este vayan cambiando, desde su posición ante los demás, como sus ambiciones.


Hay que decir para empezar que la forma en que Yazpik toca este tema es muy ingenioso, si bien no el más ingenioso, si lo es desde el punto en que nadie lo había tocado así, indirectamente el problema de la droga y como esto empezó por allá de los años 80's tiene una linea muy directa con la trama y el relato de la película, pero no es para nada la esencia, la materia principal con la que se desarrolla. Por un lado tenemos la exposición de este hombre que en un principio sacrificó su vida y su felicidad en aras de seguir un mejor futuro, futuro que quizá no consiguió por falta de apoyo, ya fuera de su gente, del gobierno, (cuando digo esto lo digo desde el punto que en lugares muy remotos aún hoy día es muy difícil que ciertos sectores de la población cuenten con una educación digna, ya no digamos en aquellos años) luego de no haber conseguido lo que quería, tuvo que sacrificar ese sueño para trabajar en lo que pudiera, y aquí es donde se origina tiempo después el tener que sacrificar su estabilidad emocional para irse a internar a la boca del lobo y sufrir al ver lo que dejó atrás cuando se fue, y una vez estando en el lugar tiene que hacer un sacrificio más y dejar una vez más todo atrás para que las cosas están bien en el lugar que deja, aunque esto sea lo que él piensa, porque de alguna manera él ha llevado lo que quizá a la postre destruiría la tranquilidad de este lugar para siempre y que hemos visto en otras películas como Pájaros de Verano, y ese es el dios capital.

Aunado a eso hay que reconocer la gran labor que hace Yazpik con su película, sin llegar a ser algo fuera de lo ordinario, si es muy decente su trabajo con un guion bien escrito, la cámara y la fotografía están encargados por el gran Tonatiuh Martínez, (Egresado del CUEC, y fotógrafo de las últimas dos películas de Ernesto Contreras [los recurrentes del blog, sabrán que en particular estas dos películas que son Las Oscuras Primaveras y Sueño en Otro Idioma son de mis películas mexicanas favoritas de la década]) consigue unas tomas en verdad extraordinarias. Cuando uno ve una película de un lugar que uno conoce muy bien, como mínimo uno desea que se le retrate dignamente, en esta película lo hacen. La recreación del lugar, la época, y todo lo que conlleva la vida en este lugar, desde los modismos, la forma de ser de la gente y su manera de hablar, lo plasman a la perfección. Las actuaciones son muy buenas, el hecho de que Yazpik protagonice la película, y como juega con ciertos roles en su actuación como la cuestión de "el artista" son muy plausibles, (además de comentar el gran parecido que me parece tiene con Miguel Rodarte en esta película en particular) pero la gran sorpresa para mi es Mariana Treviño, que lo hace tan sorprendentemente bien que me parece en el personaje de Jacinta encuentra al papel de su vida. Luce su acento sin que se sienta ridículo (que luego es lo que a mí más me choca de ella como actriz) y es tan mesurada incluso en su expresión corporal que yo en verdad le creí el papel de habitante de San Ignacio.

Yazpik nos muestra esa otra cara del narcotráfico, esa que se aleja de la violencia y la sangre, pero que de igual manera no deja de ser importante la manera en que hay que ponerle atención y enfatizarla, por un lado como se sirve del dinero para "ayudar" a poblaciones donde la ayuda gubernamental no llega, y como se vale de personas que luego de no poder seguir con sus anhelados sueños y viéndose en soledad y lejos de su casa, para seguir ganando poder. Como lo dije, sin ser la mejor propuesta del año en el cine mexicano, si es interesante el acercamiento al tema sin llegar a extremos sólo por morbo o llenar la taquilla, Yazpik nos habla de un tema importante para él y para todos, desarrollándolo en un lugar importante para él (el actor llegó a comentar en entrevistas dadas que parte de su familia es de San Ignacio), y que se nota en esa dedicación que hace al final de la película, justo cuando segundos antes muestra el anhelo de lo que el Chato pierde por segunda vez en la vida, y que no sabe si algún día va a poder conseguir.

Por cierto, comentar que el título de Polvo, si bien podría fácilmente vincularse al hecho del polvo en si que va a recuperar a San Ignacio, también podría servir como metáfora de los tonos amarillos que predominan en la película, relacionados con el polvo que se origina con el viento en las zonas desérticas como lo es gran parte del norte del estado de Baja California Sur, hasta con la escena en que el (gran) antagónico de la película, su amigo Fisher tiene amenazado al Chato para que le entregue la droga, es quizá la tierra en forma de polvo lo que hace que el Chato pueda salir del apuro y hace que cometa el único crimen en su vida, quizá el único asesinato que se haya cometido en el pueblo hasta ese día, y quizá la señal del mal que ha llegado para quedarse.

Acerca del Autor

Déje un comentario

Estás comentando como invitado.