Recomendación fílmica: HELL OR HIGH WATER, de David Mackenzie
Si a esta película tuviera que adjuntarle un nombre sensacionalista alternativo, (que ustedes sabrán como odio cuando prensa sobre cine [me niego a decir prensa cinematográfica] hace esto) sería: "Un Sin lugar para los débiles a la texana". Y sé lo que estarán pensando, seguro con este título la película es una aberración, pero la verdad es que es todo lo contrario.
Hace años cuando estuvo en la carrera de premiaciones, se hablaba muy bien de ella por parte de críticos, pero no había tenido la oportunidad de verla, o la facilidad para hacerlo, de modo que Netflix al tenerla en su catálogo facilito para que ahora no rehuyera a revisarla, y vaya que si me dejó realmente con un buen sabor de boca.
La película sigue la vida de un par de hermanos que se dedican a robar pequeños bancos en poblados pequeños de Texas, para saldar la deuda de la hipoteca del rancho que les ha heredado su madre. El más chico, el serio, el inteligente, el que jamás incidió en un delito, es quien quiere que sus hijos no sigan el legado de la mayoría del estado, el mayor, el rebelde, al que le gusta el caos, lo ayuda por lo que le hizo sufrir a él y a su madre mientras estuvo en prisión, todo esto mientras vemos como el casi retirado ranger (acá uno de los grandes guiños a Sin lugar para los débiles)los persigue en compañía de su compañero comanche que no podría estar más próximo al menor de los hermanos.
La película es una crítica muy sutil, pero palpable, a lo que el gobierno republicano hace a través de bancos y las compañías petroleras para auspiciar sus pretensiones bélicas a costa de endeudar a personas comunes y así poder tener más capital. Quizá el más grande logro de esta película está en la concepción de los personajes desde el impecable guion de Taylor Sheridan, (el director dedica la película a sus padres) que nos muestra detalles muy pequeños y comunes de una persona normal, y que jamás se pierden en la película, actúan y se comportan porque así son, porque es su naturaleza desde siempre, y jamás traicionan eso. Esto me hizo recordar por la misma situación a la extraordinaria Tres anuncios por un crimen. La película por momentos pareciera que por cómo se plantean las acciones, o se nos dice que se darán, se siente arriesgado el desarrollo, la ejecución o lo que se trata de plantear con la trama, pero pequeños giros de tuerca que jamás son muy descabellados, den una congruencia a todo el argumento, y eso se disfruta, una película, que, dentro de su ficción, lleve una continuidad y desarrollo lógico y armónico, sin lugar a dudas es una película muy importante. Por cierto, ¿alguien recuerda las líneas finales del personaje de Tommy Lee Jones en Sin lugar para los débiles?
Por cierto, en esta ocasión el nombre alternativo que pusieron a la película en Latinoamérica funciona perfectamente: Enemigo de todos.