Recomendación fílmica: PACÍFICO NORTE
Uno de los tantos festivales y muestras que ha albergado en últimos meses la plataforma de Filminlatino en México, es el llamado "24 Risas en casa: festival online de cine y comedia". Dicho festival tuvo en su programación un gran número de cortometrajes y tres largometrajes, entre los que se encontraba esta película que nos llamó la atención por la puntual recomendación de nuestros amigos de la Red de Cineclubes de La Paz, y el hecho de que es una película que cuenta con una parte rodada en Baja California Sur.
La película retrata y narra a través de la cámara de Sofía, el viaje de esta mujer con sus dos amigas, Marielena y Clarita, un viaje que tenían planeando desde un año atrás, y el cual contemplaba recorrer toda la costa del Pacífico hasta llegar a un hotel de ensueño, según lo planeó Marielena. Sin embargo, en el camino surgen complicaciones, problemas entre ellas y confesiones que no esperaban; la cámara va haciendo un registro de los temperamentos de cada una, de las particularidades de su amistad y del regalo que Sofía quería hacer para sus amigas tan diferentes y únicas, llenándose de su presencia y de una mirada que estaba en descubrimiento. Pareciera que Clarita es la que cuenta la historia, y el regalo que Sofía pretendía dejar a sus amigas antes de despedirse de ellas, resulta ser al final en realidad un regalo para ella misma.
Me parece que la película aborda de manera muy sencilla las dificultades de las amistades, más en preciso en este caso, la amistad entre mujeres. Vemos a cada personaje en su complejidad y con sus diferencias, pero con el común denominador que las une: la amistad. Una amistad que no siempre se tiene que saber explicar, simplemente sentir. Se hace patente una famosa frase de Mark Twain que dice: "La forma más fácil de saber si amas u odias a una persona, es viajando con ella", esto es un ejemplo de ello. Observamos la personalidad de Sofía que piensa vivir la aventura sin restricción alguna, muchas veces sin pensar que no viaja sola, pero no por malicia, sino por una necesidad incluso orgánica, (la cual incluso le causa una especie de temor) pero presenciamos cómo su pensamiento va cambiando durante el trayecto. Vemos una Marielena que percibe el viaje como una escapatoria a su rutinaria vida y a una depresión quizá no es tan latente, pero que por esa razón es muy preocupante; y, aunque no quiere ser como Sofía, que es con quien tiene más problemas, evidentemente hay algo que le causa conflicto y se proyecta en la presencia de "la gringa". Y tenemos el personaje de Clarita, que es la mediadora y quien probablemente trae arrastrando una mayor presión que sus amigas y todo lo que sucede en el viaje tanto la distrae como la mortifica. Pero aquello que Clarita carga, al final deja de causarle ese gran peso, ahora es una transformación, y de aquí que la mirada de la cámara, que es la de Clarita, sea como ya lo mencioné, una mirada de descubrimiento.
La película escrita y dirigida por Valentina Sachetti es un trip-road-movie que me parece en su simpleza radica su principal virtud y belleza, es una mirada palpable y con mucho cariño, aunque de momentos se torne un poco fuerte, a los conflictos y tensiones que se llevan en una relación, y como estos al final resultan ser no tan significantes cuando definimos que tan importantes son esas personas con las que hay en conflicto en nuestras vidas. Con el atractivo adicional que me parece reside en los lugares donde se filma la película, y cómo los filma, que no sólo comprenden a Baja California Sur, con locaciones en Todos Santos, Pescadero y La Paz, sino también en Sinaloa, como el pueblito al que van en busca de hongos.
Y tampoco puedo dejar de mencionar un hecho que yo siempre destacaré en películas con el tipo de producción que tiene esta: la importancia que se nos muestren caras diferentes a las que siempre vemos, con excepción de Danae Reynaud, quién últimamente se ha hecho muy conocida por su película Lady Rancho, y a quien particularmente nosotros conocemos por el trabajo La nuca desnuda de Olivia de la realizadora duranguense Deniss Barretony de Lucia Leyba, a quien ubicamos más por su trabajo en series de televisión; el resto del reparto no es conocido, y es maravilloso ver por ejemplo la participación del pescador (no sé si será actor profesional o no), o de Elena del Rio, quien interpreta a Clarita, sobre todo, en esa escena en la que está en la playa al amanecer y hay un parecido muy distintivo con el videoclip de la canción Yellow de la banda Coldplay.
De modo que, como ya lo comenté antes, sin ser tan profunda, pero si con una puntualidad sobre el tema principal que aborda, y haciéndolo de una manera me parece sencilla y relajada, se logra una película muy entretenida, divertida y logra crear algo empatía con sus personajes, e incluso por qué no, vernos en algunos puntos, identificados con alguna de ellas, y si, aun siendo hombres los espectadores podemos vernos identificados con los problemas, dudas e inquietudes que encuentras en el camino estas tres chicas, para que sirve el cine si no es para eso, para identificarnos si así lo refiere la película, hasta con un filete de pescado.
Uno no deja de ser uno. Cambia, pero no deja de ser uno. Somos como la gente nos recuerda.
Uno es lo que uno hace, y lo que uno hace lo forma. [...] Yo nací pescador.