Temas femeninos: ¿CRISIS DE LOS 40´S?
Sin duda a lo largo de nuestra vida pasamos por diferentes etapas que nos llevan, de principio, a extrañarnos de nuestro propio cuerpo e ideas, así como a un proceso de exploración, autoconocimiento y adaptación. Y si ustedes, queridas jóvenes amigas, creen que la adolescencia es el mejor ejemplo, déjenme decirles que no, la cosa se pone mejor; después de los cuarenta seguimos con grandes cambios e incluso sensaciones de extrañeza. Déjenme decirles a qué me refiero.
Platicando con algunas amigas que, al igual que yo, ya pasan las cuatro décadas, coincidimos en la presencia de cierta crisis que llega a movernos el piso en cuanto dejamos los treintas. Sí, parece que muchas mujeres al llegar a los cuarenta decidimos hacer una pausa y revalorar su proyecto de vida. Es interesante pero parece que surge cierta necesidad de afianzamiento, y que va más allá de los roles de esposa, madre o hija. Y es que comenzamos a sentirnos extrañas, nada jóvenes, pero tampoco viejas; puede surgir una sensación de confusión o ansiedad por cumplir metas; empezamos a preguntarnos por todo aquello que no hemos hecho, por las oportunidades que dejamos pasar, o las que quizá creímos que no merecimos, etc. El punto es no desesperar y saber que como toda crisis, esto nos ayudará a madurar y a salir en busca de la verdadera felicidad. Y como lo que importa es la búsqueda, pues ya sabrán…
Los cuarenta son el punto en la vida de una mujer, especiales para hacer un alto, inspeccionar el presente, ver qué es lo que realmente deseamos, qué sale sobrando, vivir y planear el mejor de los futuros posibles.
Hay quienes dicen que los cuarenta pueden ser como los segundos treinta; quizá puedes descubrir nuevos deseos, ganas de hacer cosas “locas”, pero ya contarás con la libertad, independencia y experiencia de una mujer adulta. Todo puede estar a nuestro favor. Y si no sienten que es así, tampoco es tarde para empezar, por eso parece que después de la crisis, podemos decir que es una edad perfecta.
Además, en relación a la sexualidad las cosas han cambiado mucho, las mujeres debemos saber que un cuerpo perfecto es aquel que cuidamos y amamos; así que nada de preocuparnos por arrugas o por no alcanzar el “peso perfecto”. La clave para que una mujer disfrute su sexualidad, a los veinte o a los cuarenta, siempre será la confianza en sí misma y en su compañero, un conocimiento pleno de su propio cuerpo y muchas ganas de ser dueña de su propio deseo.
Así que estén atentas, queridas amigas cuarentonas, esta edad es para ser quienes quieran ser, aprender de todas las lecciones vividas y seguir trabajando en construir a plenitud su vida.