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Temas femeninos: Lo más simpático del orgasmo femenino

Escrito por Nínfulas en Martes, 09 Junio 2020. Publicado en Cultura, Sexualidad, Sexualidad Femenina., Temas Femeninos

¿Cómo describirían un orgasmo? ¿Hablarían del propio o el ajeno, de lo que sienten o lo que observan?

Cuando tenemos un orgasmo, muchas ya lo habrán notado o lo sabrán, se nos dilatan las pupilas (obviamente si en el acto tienen los ojos abiertos), otros no se habrán percatado de esto ya que sólo es una de las muchas reacciones que nuestro cuerpo produce al activar el sistema simpático.

 ¿El sistema qué…? Sí, veamos: el sistema nervioso se divide en dos partes, el sistema nervioso central y el sistema nervioso periférico; dentro del sistema nervioso periférico, está el sistema nervioso autónomo, y a su vez éste último contiene al sistema simpático y el parasimpático. El sistema simpático nos prepara para la acción.  Este es el sistema que media en la respuesta de estrés hormonal; cuando nos sentimos de cierta forma amenazadas, se activan las fibras de nuestro sistema llegando a casi todos los órganos y sistemas del cuerpo; se puede decir que manda una serie de mensajes para que se esté alerta a una posible lucha o huida, lo que hace que aumenten los latidos del corazón, se estimule la sudoración en diferentes partes de nuestro cuerpo, dilata los bronquios y pupilas, sentimos sensaciones de frío o calor hasta controlar la motilidad intestinal, entre otros. El sistema parasimpático se complementa con el simpático, es responsable de la regulación de órganos internos del descanso de la digestión y las actividades que ocurren cuando el cuerpo está en reposo o relajado, como el sueño.

El asunto es que internamente nuestras células responden a señales químicas, y por otra parte son un conjunto de nervios que activan músculos y recogen información de sentidos y órganos para enviarla al cerebro. Parece algo extraño, pero durante el orgasmo nuestros bronquios y pupilas de dilatan para respirar y ver mejor, ya que son efectos de cambio del sistema nervioso autónomo parasimpático al simpático, además se segrega adrenalina como preparándose para la acción.

JimPfaus uno de los principales expertos del mundo en el estudio científico de la sexualidad, nos comparte un ejemplo: "A muchos chicos les habrá ocurrido algo paradójico, estar con una chica que les gusta y mentalmente muy excitados, pero al mismo tiempo muy nerviosos e incapaces de tener una erección. En España a eso se le llama "gatillazo", y en realidad ocurre porque el estrés ha activado las fibras simpáticas antes de tiempo. Esta activación implica que se retire sangre de las funciones corporales no imprescindibles para enviarla a los músculos. Pues bien, si una situación de estrés activa el sistema simpático, por muy excitado que esté un hombre, su cuerpo retirará sangre del pene y la enviará a los músculos y no podrá tener una erección. En estas circunstancias el sistema nervioso no es precisamente tan "simpático". Pero también hay otra implicación: una vez empezada una relación sexual, para llegar al orgasmo se requiere la activación de esas fibras simpáticas. Es por esto que en algunas mujeres a las que les cuesta llegar al orgasmo, el estrés o la tensión puede facilitarlo."

Tal vez social y psicológicamente, hombres y mujeres, podemos vernos diferentes, pero neurofisiológicamente somos muy parecidos, si tu deseas tener una vida sexual saludable, debes de tomar en cuenta que el sexo no sólo está en la cabeza, también en tu flujo sanguíneo, músculos y niveles hormonales, debes conocer tus sensaciones, abrir tu mente y ser positiva, estar y sentirte en buena forma es necesario si quieres alcanzar una sexualidad plena.

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