Temas para jóvenes: Cosas que toda chica petite debe vivir en el amor.

Ser una mujer chaparrita no es cosa sencilla, la vida diaria está llena de retos que la gente alta no tiene ni idea que existen. Y el amor no es la excepción, pero aquí nuestro chico tiene la oportunidad de sacar al príncipe que lleva dentro y hacernos la vida más sencilla, linda y romántica.

Y estas son de las cosas que más esperamos nos pasen, así que chicos pongan atención.

Prestarle camisas

La ventaja de ser chaparrita es que puedes aprovechar algunas prendas de tu novio, por ejemplo sus playeras. Un cinturón y se convierten en unos vestidos preciosos. Así que un novio que no tenga problema en compartir su ropa vale oro.

Cargarla en los conciertos

Ser bajita en conciertos en donde todos están parados es el infierno mismo porque tú no ves más que espaldas y traseros. Así que si tu novio te carga para que tengas una vista privilegiada es como ganarte la lotería.

Ir con ella de compras

Los supermercados están llenos de estantes altísimos, y siempre lo que queremos comprar se encuentra hasta arriba. Así que acompañarla de compras evitará que haga esto, se caiga y se descalabre.

Ser cargada cuando hay charcos

Yo sé que suena muy de película eso de que un chico te cargue para que no pises un

charco, pero cuando eres bajita ese charco es como un pozo sin fondo, así que más bien nos estarían salvando la vida.

Recibir un ramo de su tamaño

Imagina ser una chica chaparrita y que de pronto te den un ramo que sea exactamente de tu tamaño ¡Un sueño!

Cambiarle el lugar en el cine

El cine es otro lugar problemático y es que con que sobresalga tantito la cabeza de enfrente ya no puedes ver la película bien. Así que un chico que esté atento a los detalles es vital.

Un banquito lindo de regalo

Un banquito lindo y antiderrapante es un excelente regalo, de verdad jamás lo tomaremos a malo!

Que se agachen al besarla

Colocar el espejo a su altura

Sueño que el día que me case, mi esposo sin aviso ni nada, coloque el espejo del baño justo a una altura a la que yo pueda verme sin pararme de puntitas, así sabré que me case con el indicado.