Todavía hay poca internacionalización en universidades latinoamericanas: rector de universidad de Salamanca.
A casi 800 años de fundarse la Universidad de Salamanca en España, “es todavía escasa la internacionalización de reconocimiento de titulaciones y movilidad internacional de alumnos y profesores en América Latina y el Caribe”, manifestó el doctor Ricardo Rivera Ortega, magnífico rector de la Universidad de Salamanca durante su conferencia magistral el 5 de abril en el auditorio de la antigua escuela de medicina de la U.N.A.M. (Universidad Nacional Autónoma de México) en el marco de la VII Asamblea de UDUAL (Unión de Universidades de América Latina y el Caribe) y que congregó a decenas de rectores del continente, entre ellos a la rectora de la Universidad Mundial, doctora Judith Moreno Berry.
El doctor Rivera recordó que fray Bartolomé de Las Casas fue formado en la Universidad de Salamanca y que también tuvo un rector nacido en la Nueva España (México) que fue don Diego de Castilla. Destaca un número importante de latinoamericanos que actualmente trabajan en la mencionada casa de estudios, pero todavía hay poca presencia.
Rivera recordó a don Diego Muñoz quien siendo rector de la universidad de Salamanca y colaborador de la elaboración de la Constitución de Cádiz de 1812, falleció torturado por tal causa. Un siglo después habría de llegar a Latinoamérica el movimiento universitario en Córdoba, Argentina, donde se dio el progreso del conocimiento y el reconocimiento de la autonomía de las universidades.
El rector salamantino expuso una propuesta expresada en tres objetivos:
1.-Incorporar el respeto a la dignidad de la persona en las relaciones internacionales de las universidades. Igualdad de derechos para hombres y mujeres. Desarrollo social, equidad.
2.-Realización de objetivos de desarrollo sostenible del entorno.
3.-Universalización del acceso de todos los universitarios aunque no tengan financiamiento. Internacionalización de varios idiomas en la difusión de revistas científicas, principalmente español y portugués y no sólo inglés.
Rivero señaló que “quien compite con las reglas de otros, fracasa”. Por ello habría que cambiarlas y no debe importar el ranking (medición que siempre pone a universidades norteamericanas y europeas como las primeras del mundo y excluye a todos los demás), sino las realidades locales y regionales.
Finalmente, llamó a las universidades comprometidas con lo interior para contribuir con la transformación social, a reivindicar el mejor modelo de universidades. “ Las sociedades del conocimiento que triunfarán serán las que atiendan a las personas con respeto a su dignidad, igualdad, equidad y con el medio ambiente en su entorno”, indicó Rivero.