Y seguimos pidiendo la palabra: A MI GOYA
Para ellos ¿qué será?
¿Será como lo vemos nosotros?
Ellos que no piensan
¿o acaso lo harán?
¿Sabrán que sólo viven en un pedazo de tierra
o de mar, o de cielo?
Quisiera conocerlos.
Que el aire húmedo llame
a mi despertar.
Y hablar con ellos igual que ellos.
Cantar en sus cantos sin miedo.
Las hormigas corriendo.
Tortugas encerradas.
Peces escondidos bajo piedras.
Aves huyendo.
Sólo mi gata acompañándome
Pero sin entender mis metáforas,
Sin saber de libros
Ni de árboles que caen;
Que la casa es sólo un lugar donde habitar;
los pies incoherentes
De la obra de vivir, del concierto.
Mis deseos en el escaparate
¿Acaso sabrás de tu sombra,
Del ángel bueno y malo,
De que sólo a veces tengo pan para comer?
Y ella sólo jugaba con su cola
Sin saber por qué la nieve,
Por qué se pudre la madera,
Del cielo gris o del polvo
De por qué estás aquí,
Por qué el hombre huye del hombre.
Cada mundo tiene su especie.