Cultura empresarial: CARACTERIZACIÓN DE UN LÍDER
Hemos comentado con anterioridad en esta columna, las implicaciones que la tercera revolución industrial, en las dos ultimas décadas antes de finalizar el siglo XX, trajo consigo. Una de estas consecuencias fue la globalización económica y en su forma más general, un cambio de paradigma social. El elemento fundamental de este tránsito de épocas es el cambio de actitud al interior de las personas.
Una de las características de este nuevo modelo mental es la aplicación de una mentalidad de abundancia, en la que el modelo ganador-ganador es el mas adecuado para el establecimiento de relaciones productivas entre los individuos y entre las propias instituciones. Para el establecimiento de tal no de los pasos más importantes en el desarrollo de la cultura organizacional, es el proceso de alineación entre los principios y valores que rigen el desarrollo de la vida y las actividades institucionales con los correspondientes a los individuos que la conforman, este proceso de desarrollo del cambio de cultura de la organización obliga necesariamente a un trabajo de liderazgo, sea éste de un individuo ó de un grupo que dirige la organización. Este modelo ganador-ganador ó como le llaman los matemáticos: “juego de suma positiva”, obliga a un liderazgo centrado en los principios y valores inherentes a la organización. Este núcleo de principios y valores, sirve de base para la correcta toma de decisiones y marcan el rumbo a seguir de las acciones cotidianas que aseguren la convergencia entre el “deber ser” y el “ser”.
Desde luego que visto desde esta forma, es importante la designación del ó los lideres que habrán de asegurar el trabajo necesario para la instalación del modelo ó paradigma que aseguren la productividad organizacional deseada, pero ¿ que es un líder ?
Resulta imposible definir el concepto de líder, aún cuando la mayoría de nosotros tengamos una clara idea de quienes son nuestros lideres. Una de las frases que más me gusta como un buen intento para la definición de líder, fue dada hace varias décadas por V. Packard: “ En esencia el liderazgo es el arte de lograr que otros QUIERAN hacer algo que tu estas convencido que debe ser hecho.”
Ante la imposibilidad de definir este importante concepto, resulta útil buscar una caracterización que al mismo tiempo nos ayude a estudiar el proceso necesario para obtener acciones de liderazgo. Lo anterior lo podemos encontrar examinando como un 50% de esta caracterización lo que los lideres opinan sobre los pasos que integran el proceso de liderazgo desde su propio punto de vista y el otro 50% de esta caracterización se obtiene de lo que los seguidores opinan sobre lo que esperan o buscan de sus lideres.
El estudio de las opiniones de varias decenas de lideres, deja ver cinco coincidencias importantes en lo que ellos mismos consideran como acciones involucradas en el comportamiento de un líder y sus acciones de liderazgo. Estas son:
1.-Retar a un proceso
2.-Inspirar una visión conjunta
3.-Permitir a otros actuar
4.-Ejemplificar el camino
5.-Fortalecer el sentimiento de participación (apasionar)
Desde luego que sin seguidores no hay líder, ya que ellos deciden acerca de quien será reconocido como tal, por lo que es importante estudiar lo que los grupos de seguidores opinan de sus lideres. La aplicación de diferentes encuestas evaluando los valores que los integrantes de un equipo de trabajo buscan o admiran en sus superiores, dejan ver con bastante frecuencia y claridad que admiramos a un líder que es:
1.-Honesto
2.-Competente
3.-Con visión de futuro
4.-Inspirador
La honestidad, la competencia, la visión de futuro y el ser inspirador, tomados por separado, pudieran no ser una buena descripción de liderazgo, pero juntas pueden comprender lo que los expertos en comunicación llaman: “CREDIBILIDAD”
Los lideres ganan su credibilidad mediante sus acciones: Retando procesos, inspirando, reforzando, ejemplificando y apasionando a sus seguidores.