Y seguimos pidiendo la palabra: CERRITOS, BAJA CALIFORNIA (O DEL WIND SURFING) (21-Jun-14)
Los lunares del mar me fueron poseyendo. Por las noches los miraba a través de mi ventana, atónito. Un día me embargó un collarcillo de dientes de tiburón y tomé las olas por asalto.
Nunca más me volvieron a ver.