Andanzas Nocturnas: Una Experiencia como Pocas
Ayer por la tarde empezaban los preparativos para la reunión que se llevaría a cabo en los terrenos de la Universidad Autónoma de Baja California Sur.
Organizadas por los amantes de la lectura, los últimos preparativos (bocadillos, leña, y libros de intercambio y a la venta) estaban listos.
A las ocho de la noche dio inicio esta estimulante actividad, invitando a los asistentes a compartir sus más significativas lecturas como poemas, pensamientos y fragmentos de algún cuento.
A la luz de la fogata y bajo el cielo infinito de la noche, la luna se escondía entre una que otra nube, el café en las tazas era bebido por almas que expectantes guardaban silencio para apreciar las palabras que el lector en turno pronunciaba tanto para sí como para todos.
Así, cada persona en el lugar pasó al frente para captar las mentes atentas, mientras al fondo para amenizar el rato Alan y Víctor hacían vibrar las cuerdas de sus guitarras junto a las sombras que danzaban con el fuego.
La Panga de Caronte también se hizo presente y con sus alegres melodías y excelentes letras enriquecieron la reunión.
Entre los árboles las velas parecían pequeñas estrellas que curiosas habían bajado para ver y deleitarse con la con la acogedora atmósfera de las andanzas nocturnas.