¿Doppler y El sindicato?
Mi nombre es Duna Conde y muchos años de mi vida los he dedicado a "la vida nocturna" (cinco son muchos cuando se tiene la edad de 25).
Pues bien, esos cinco años los he dedicado a cantar en algunos bares de la ciudad, cosa que disfruto mucho, pues hacer bailar y cantar a la gente es una satisfacción que con felicidad se paga. Pero salir de noche al bar para trabajar es muy distinto a salir de noche al bar para pasar un buen rato con los amigos, beber una cerveza bien helada, corear tus canciones preferidas y bailar con la banda.
Es por eso que la noche del 31 de julio decidí salir de mi casa en busca de un agradable rato. La verdad es que primero busqué en Facebook y me encontré con una publicación que decía:
"Noches de rock en el Sindicato presenta: Doppler" ¿Doppler? ¿El Sindicato? "una banda de rock alternativo (cóvers) conformada por Leonardo cruz, Alan Flores, Isai Romero y Mario Montaño.
Esperamos puedan acompañarnos.
La cheve estará en 20 varos de 10 a 11 pm. Después subirá sólo 5 pesitos.
El lugar es Lerdo de Tejada, esq. Zaragoza en el centro".
Nada mal, así que salí, como decía "en busca de un agradable rato...
Al llegar, como a eso de las 10:30 de la noche la banda ya estaba sonando recibiéndome al pegajoso ritmo de "you only live once", algo de los Strokes. La entrada del lugar me pareció de buen gusto, una puerta alta con un letrero hasta arriba iluminado con un par de farolitos que dice "El Sindicato".
Al introducirme en el bar fui víctima de la buena vibra, me topé con la barra que es parte de un pequeño corredor. Al fondo el grupo de rock y frente a ellos sillas y mesas. Una decoración discreta con un pequeño aire de elegancia desenfadada.
Del ambiente ni hablar, una buena selección de canciones que nos hicieron cantar, bailar, y bromear con los músicos, hasta palomazos y complacencias hubo, fue la noche en la que el público no dejó de pedir canciones, "Soda" se escuchaba por u lado, "la del taxi" se escuchaba por el otro mientras se curaban el calor con una cerveza o una margarita bien helada disfrutando una buena botana.
En pocas palabras el Sindicato puso el aceite, Doppler las papas y nosotros las freímos.
Fue una de las pocas noches que no salí por trabajo y puedo decir que verdaderamente me divertí.