¡Volemos!
Encontrándome al borde de un abismo
Conforme fue anunciado
Por misterioso vaticinio de un sacerdote druida
Fui empujado… y
Salí volando.
Mi aleteo inusitado
Hendió los aires con vehemencia
En el afán de emparejarme
Contigo en las alturas
Gaviota de las alas esmaltadas
Y así girar contigo en los inicios
De una danza ritual
Bajo el cielo topacio de la tarde.
Quiero volar distancias a tu lado
Con rumbos imprevistos
No importa que los vientos de violencia
Que con frecuencia azotan la bahía
Sacudan el oleaje
O hinchen cóleras y agravios de mortales.
Volar… volar contigo en las alturas
Hasta que tu plumaje
Y mi plumaje
Se saturen de brisas
Antes de mi descenso en las honduras
De los acantilados
Que me aguardan
Con sus fríos peñascos invernales.
Las nubes se desplazan a lo lejos
Como mi orgullo en lenta retirada
O como tus temores en su fuga
Que me abren los espacios de tu cielo.
Ven conmigo y volemos
Gaviota de las alas esmaltadas
Volemos con las alas agitadas
Exploremos tu mar y sus mirajes
Y que tu velo suave
Y mi aleteo
Armonicen su ritmo
En un acorde musical sin fecha
Mientras llega el silencio ineludible.
Amadeo Peralta.