Postales de BCS: LA TALEGA DEL CAFE
La Palabra Talega proviene del árabe Tal´iqa (el hecho de que algo cuelgue) y del verbo ´allaq (colgar), se llama a la nota de pie de página, porque es un comentario que “se le cuelga al texto” (similar al concepto de la palabra apéndice). Y en verdad en la talega del café es algo que cuelga de la base, en este caso la tela que cuelga de la base de alambre.
La tela de la talega puede ser de lino, dacron o algodón, pero lo mejor es que sea de lienzo. La talega se debe vaciar de los asientos del café y enjuagarla bien después de usarla, hay personas que dicen que no se debe usar detergente para que no se impregne el olor, solo bastante agua tibia y tallarla bien, otros dicen que se puede lavar con jabón neutro, pero todo caso hay que dejarla secar bien y guardarla en un lugar especial.
Con el paso del tiempo es normal que los aceites del café molido como el caffeol empiecen a teñir la talega, pero esto no afectará su sabor al colar el café. Estos aceites pueden ser disueltos y eliminados frotando la talega una vez al mes con sal, seguido por enjuague meticuloso para quitar toda la sal.
Algunos recomiendan que si vas a iniciar a preparar café de talega debes tener dos o tres talegas para intercalar su uso, de hecho una talega tiene mucha resistencia y te puede durar muchos meses, así que esto es decisión de cada quién.